Últimamente le hemos dado bastante importancia a un tema cada vez más importante el el mundo de la informática. El consumo energético que realizan los dispositivos. El motivo por el que es más importante es obvio: Cada vez hay mejores portátiles y un considerable porcentaje de usuarios ha sustituido -o desplazado- sus equipos por tabletas o dispositivos móviles que dependen de la batería.
En determinadas ocasiones, por supuesto, tendremos acceso a corriente, pero si por ejemplo estamos haciendo un largo viaje en tren y no nos es posible cargar el equipo suficientemente, cambiar el perfil energético puede ser una buena idea. La cuestión es... ¿Es suficiente el nuevo perfil de energía?
La respuesta a la pregunta puede venir de la mano de un informe energético, el cual podemos crear gracias a Windows, que incluye las herramientas necesarias para ello. Si tenemos un sistema Windows 7 o superior, basta con realizar las siguientes acciones para tener una impresión de qué dispositivos consumen más de la cuenta:
Abrir el diálogo ejecutar (Windows + R) Entrar en el símbolo del sistema ejecutando cmd En la pantalla de consola, escribir powercfg /energy*
Inmediatamente el sistema se pondrá a monitorizar los diferentes dispositivos en busca de problemas de eficiencia de energía. Los resultados que obtengamos deberían ser similares a estos:
11 errores y 25 alertas que aparecen recogidas en un fichero informe que se crea en vuestra carpeta de usuario:
C:UsersUsuarioenergy-report.html
Una vez abierto, nos encontramos con un breve resumen del sistema y los resultados del análisis. En mi caso, por ejemplo, me encuentro con los siguientes errores y alertas:
Tomemos los dos siguientes:
Power Policy:Display timeout disabled (Plugged In) System Availability Requests:System Required Request
La explicación en castellano -que nos indicaría el informe en caso de tener el sistema en dicho idioma- sería que en el primer caso el sistema no está configurado para apagar automáticamente la pantalla después de un intervalo de tiempo, y que una aplicación o driver ha pedido a Windows que no deje dormir el sistema.
En mi caso ambas son controladas, es decir, personalmente en este momento no permito al sistema que apague el monitor, y tengo una aplicación que impide que éste duerma cuando estoy trabajando.
En la sección de alertas me encuentroo con avisos de consumo de energía, provocados por ciertas aplicaciones abiertas que tienen un mayor uso del procesador. El procesador de texto, entorno de desarrollo o navegador de Internet son las culpables. Esto nos indica dos cosas: La auditoría debería realizarse cuando no estemos ejecutando ninguna aplicación, ya que damos por hecho que el uso de aplicaciones será un mal menor para el uso del sistema, algo necesario pero que en realidad no podemos dejar de hacer para ahorrar batería.
La segunda, que un simple comando de Windows puede ser ideal no sólo para ayudarnos a configurar el sistema de forma más eficiente, sino también para detectar problemas o ajustar parámetros y tomar decisiones que no podemos tomar a través del diálogo de configuración del perfil energético. En mi caso tengo algún programa residente que está consumiendo excesiva energía y que en situaciones en las que no tenga acceso a corriente no utilizaré en ningún caso.
Una vez hemos terminado de inspeccionar el documento de informe podemos eliminarlo sin ningún problema, y si hemos repasado los puntos que el mismo nos indicaba y hemos hecho algunas correcciones en nuestro equipo, seguramente queramos volver a ejecutar la auditoría y ver el nuevo informe. Todo sea por ganar unos valiosos minutos de autonomía en nuestro portátil, o por hacer un menor consumo energético en nuestro ordenador, en definitiva.