Uno de los aspectos más grises del sector tecnológico es la guerra de patentes (a escala mundial) que mantienen o han mantenido gigantes como Apple, Samsung, Microsoft o HTC, por citar algunos ejemplos. Quizás nos hayamos acostumbrado a este tipo de enfrentamientos y casi no nos sorprendan, sin embargo, las patentes no son el único punto de conflicto entre las empresas del sector y los players de la red parece que han descubierto un nuevo arma con el que ganar terreno o favorecer alianzas en detrimentos de otras: las APIs. Twitter ha sido el caso más llamativo de giros en el uso de su API que han perjudicado a terceros como IFTTT o a Instagram. Instagram, que goza de una privilegiada posición tras su compra por parte de Facebook, ha sido la que ha movido ficha esta vez en detrimento de Twitter puesto que, desde hoy mismo, dejan de soportar la visualización de las fotografías a través de Twitter.

Las Twitter Cards son un recurso que Twitter ofrece a los servicios asociados para que, desde un tweet, podamos visualizar un contenido y su contexto más allá de un simple enlace o una imagen embebida. Instagram era uno de los servicios que hacía uso de este recurso y, por tanto, permitía a los usuarios visualizar las fotos desde Twitter sin tener que hacer clic en la url y cargar una nueva página. Desde hoy, en un movimiento bastante singular que el propio Twitter ha publicado en la web de incidencias, Instagram deja de soportar esta facilidad; algo que ha comunicado Kevin Systrom (cofundador y CEO de Instagram) en el evento LeWeb que se está celebrando en París en estos días.

Este giro de Instagram, según el responsable de la compañía, se debe a la propia evolución del servicio y su "acercamiento al mundo web" con los perfiles de los usuarios con los que podemos interactuar, dejar comentarios o likes sin necesidad de recurrir a la aplicación móvil o a los servicios de un tercero. De hecho, parece que Instagram va a profundizar algo más en esta ruptura porque también se ha planteado eliminar las fotos incrustadas en los tweets (que podíamos ver al expandir los mensajes) y, claro está, es de esperar que dejen de acumularse en la galería de imágenes publicadas por los usuarios.

Hemos tomado esta decisión ahora puesto que es cuando cobra sentido porque así redirigimos a nuestros usuarios hacia la web de Instagram. [...] Evidentemente las cosas cambian conforme la empresa va evolucionando

Obviamente la integración con Twitter no desaparece y, tras publicar una imagen, podremos compartirlo a través de Twitter aunque, eso sí, el enlace que vamos a compartir no se previsualizará en Twitter y hará que los usuarios tengan que hacer clic en el link y visitar la web de Instagram (una medida que, por el contrario, no se tomará con las integraciones existentes con Tumblr, Facebook o Foursquare).

¿Evolución del servicio o nueva estrategia de alianzas? Está claro que Instagram ha crecido mucho en este año 2012 (la acogida en Android fue espectacular) y, lógicamente, la compra por parte de Facebook le hace estar sometida a una "disciplina" en sus alianzas que, lógicamente, debe seguir la estrategia marcada por la red social de Mark Zuckerberg. Si bien Kevin Systrom alega que el servicio ha evolucionado (y es algo que podemos ver patente en los badges y en los perfiles) y no tiene sentido no canalizar el tráfico hasta su web, lo cierto es que este disparo a Twitter distancia aún más a ambos servicios (y eso que, tradicionalmente, era una simbiosis que funcionaba muy bien).

Hay que reconocer que en cuestión de giros, Twitter es la que, quizás, ha abusado más de la posesión de sus APIs y ha dado bastantes golpes de timón en estos meses (perjudicando al ecosistema de aplicaciones y servicios y, en uno de sus golpes, le pegó a Instagram bastante fuerte) y tampoco le viene mal que pruebe su propia medicina. De todas formas creo que, a largo plazo, este tipo de giros, tiranteces y retirada de funcionalidades yterminará afectando negativamente a todos estos servicios porque, al final, es el usuario el que termina percibiendo estas pérdidas de funcionalidad o comodidad en el uso.

¿Cuál será el siguiente movimiento? ¿responderá Twitter con algún nuevo giro en su API? Ojalá que el uso de las APIs no se convierta en el nuevo frente de batalla porque, precisamente, la interoperabilidad y las integraciones es un aspecto que aporta bastante valor a los servicios que tenemos disponibles en la red.