18 estructuras metálicas con forma de árbol se elevan casi 50 metros sobre el suelo de Singapur. Un extraordinario complejo eco-turístico envuelto en un jardín vertical que aprovecha la energía solar para mantenerse. Plantas trepadoras, un marco incomparable, cascadas de treinta metros de altura, un exclusivo restaurante y turistas extasiados ante la belleza del entorno. Singapur logra con Gardens By The Bay atraer la mirada hacia el sureste asiático.
Este espectacular complejo ha costado cerca de mil millones de dólares, Singapur parece una ciudad de ciencia-ficción donde rascacielos brillantes se funden con estilizados árboles metálicos plagados de vida.
Gardens By The Bay es un jardín botánico que abarca una superficie de cien hectáreas y en el que un visitante puede encontrar reproducciones de diversos y variados ecosistemas de nuestro planeta. El mayor reclamo es la zona dominada por los 18 superárboles metálicos, la Supertree Grove. En la estructura de los superárboles hay ancladas más de 160.000 plantas, una variedad de 200 especies con orquídeas, enredaderas, helechos... Los visitantes pueden pasear entre los superárboles gracias a una pasarela situada a 20 metros de altura. Los árboles están equipados con grandes paneles solares para capturar la energía del sol y además tienen recolectores de lluvia. Durante la noche el espectáculo no tiene desperdicio, la luz y el sonido nos transportan a otro mundo.
El proyecto que pretende conjugar sostenibilidad, arquitectura y ecología, ha sido diseñado por un equipo internacional de ingenieros, paisajistas y arquitectos de Wilkinson Eyre y Grant Associates. Los 18 árboles gigantes, al estar dotados con paneles solares y recolectores de lluvia, pueden producir la energía necesaria para su iluminación. Los constructores han declarado que:
El efecto deseado es crear una estructura viva. Anillos tentaculares hechos de jardines y plantas tropicales que se acercarán como una verde caricia a la bahía.
Foto: Pete Hottelet