En marzo de 2010, un equipo del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig (Alemania) anunció el hallazgo de los restos de una nueva especie de homínido desconocido hasta la fecha. El descubrimiento, efectuado en unas cuevas de Siberia (las cuevas Denísova en los montes Altai), puso sobre la mesa la existencia de una especie en áreas en las que también vivían neandertales y homo sapiens (hace entre un millón y 40.000 años). Casi 2 años después del hallazgo, el equipo científico dirigido por Svante Pääbo ha anunciado que, a partir de un trozo de hueso de un dedo, han sido capaces de secuenciar el genoma completo de este homínido al que se llamó Homínido de Denísova.
A partir de 10 miligramos del hueso de un dedo del homínido hallado del que se pudo extraer ADN, el equipo ha sido capaz de desarrollar una técnica que le ha permitido secuenciar el genoma del Homínido de Denísova mucho más rápido y con mayor precisión. De hecho, este no es el primer proyecto de secuenciación del genoma de este homínido que aborda este equipo científico puesto que, en el año 2010, fueron capaces de obtener la secuencia del 60% del genoma del homínido de Denísova que, aunque les permitía establecer relaciones entre los neandertales y los homo sapiens, no ofrecía la resolución suficiente como para poder estudiar la evolución experimentada en partes concretas del genoma.
Para que su esfuerzo vaya más allá de un artículo científico, el equipo ha decidido publicar el trabajo en la red para que toda la comunidad científica pueda utilizar su trabajo como base de futuras investigaciones.
Creemos que a muchos investigadores estos datos les podrán ser de utilidad en su investigación. [...] Aunque presentaremos un documento con estas investigaciones, queremos que sea algo que esté a libre disposición de todo el mundo desde ahora mismo.
¿Y ahora qué? Según el equipo del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig, la publicación del genoma del homínido de Denísova abre la puerta a que biólogos y antropólogos puedan estudiar los cambios genéticos que provocaron que, por ejemplo, los homínidos salieran de África y se distribuyesen por todo el mundo hace unos 100.000 años además de posibilitar un estudio en mayor profundidad de la propia historia de los homínidos de Denísova y los neandertales.
El hallazgo, de por sí, es bastante interesante pero el hecho de que hayan publicado su investigación en la red y ésta esté disponible para todo el que quiera acceder es un hecho muy significativo que pocas veces, desgraciadamente, podemos ver.