¿A quién le importa la publicidad que vemos en los diferentes dispositivos electrónicos hoy día? Podría parecer que no tiene ningún beneficio pero como bien sabemos muchas aplicaciones y servicios digitales se sufragan mediante esa publicidad. Es decir, una regla de tres simple, a más anunciantes más aplicaciones y desarrolladores en una determinada plataforma.
Por eso es tan importante que se publiquen tan buenos datos de iOS como ecosistema de publicidad, en este caso relativo al ámbito europeo. Como bien muestra la infografía incluida al final de esta entrada y realizada por InMobi Apple se ha convertido en el primer fabricante por número de anuncios mostrados en sus dispositivos móviles, un 19% del total, una cifra considerablemente superior a la de hace unos meses y que va a seguir creciendo próximamente.
Mención destacada merece el iPad, que aún sin ser un móvil propiamente dicho se coloca como el sexto modelo por número de anuncios mostrados, un montante de 80 millones de estos espacios publicitarios mostrados en un iPad tan solo durante el mes de mayo pasado. Tomando en cuenta que al tablet de Apple no le espera otra cosa que seguir colándose en todavía más hogares, este dato también seguirá aumentando en próximos meses. Pensemos además que el tablet de Apple es el producto perfecto para albergar espacios publicitarios, debido a su mayor tamaño de pantalla y a su consumo más calmado (en la mayoría de los casos en la comodidad del sofá de casa).
Por último, parece que a la plataforma Android en conjunto no le está yendo tan bien, y quizás por eso son cada vez más los desarrolladores de Android que abandonan el camino del freeware subvencionado con publicidad por el de aplicación de pago. En este caso los números hablan por sí solos, aunque el sistema operativo de Google sigue siendo el rey del continente, su porcentaje a este respecto ha bajado 6 puntos con respecto al trimestre anterior.
Excelentes los datos que muestran a un mercado europeo más maduro, más exigente, que valora la estabilidad que confiere el poseer un producto de la manzana. Es el caso de España, por ejemplo, el segundo país europeo donde más ha crecido este tipo de contenido publicitario.