Últimamente, las crisis sociales y políticas que ocurrieron en distintos países, incluyeron la interrupción del acceso a Internet o la censura de sus contenidos. Así, las redes de anonimato han tomado un papel casi crucial para sortear las trabas, como es el caso de Tor, que recibió el mes pasado un galardón por su rol en las revoluciones de Oriente Medio.
Sin embargo, esta interesante herramienta también comenzó a ser utilizada por quienes desean realizar descargas anónimas a través de BitTorrent y, como no podía ser de otra manera, las entidades gestoras de derechos de autor encontraron allí otro enemigo a combatir.
Una de las compañías que vivió esta situación fue Tor Servers, la cual recibió 190 notificaciones de DMCA en los últimos 20 días, enviadas por la firma Peer Media en representación de estudios cinematográficos y otros dueños de copyright. Básicamente, la empresa está protegida como si fuese un ISP, porque no es responsable por las acciones de sus usuarios.
Sin embargo, en TorrentFreak comentan un dato que me llamó la atención: aunque no esté facilitando deliberadamente la distribución de material protegido por derechos de autor, Tor Servers se expone a problemas con las empresas donde aloja sus servidores.
Esto ya ocurrió en una ocasión cuando Softlayer les rescindió el contrato tras recibir un único reclamo por DMCA que, aparentemente, hacía mención un puerto que ni siquiera estaba habilitado. Y si esto pasó con una sola notificación, nos da la pauta de que también puede ocurrir en otros servidores Tor, en caso de que siga extendiéndose esta práctica.
El inconveniente está en que, cualquier trastorno por eventuales traslados de equipos o el cierre definitivo de un servicio a raíz de estos reclamos, termina perjudicando a quienes utilizan la herramienta para lo que realmente fue pensada. Encima, como ya vimos, el propósito original es muy importante.
Por eso, aunque sigo creyendo que es necesario encontrar modelos alternativos para fomentar las descargas legales de películas y música, también debemos tener en cuenta que usar las redes P2P a través de Tor, puede afectar a quienes dependen de este servicio para informarse y expresarse libremente. Después de todo, existen servicios de VPN por todas partes, aún cuando sea necesario pagar para utilizarlos.