Con el advenimiento de los dispositivos multitáctiles como los smartphones y los tablets, uno acaba pensando que seguramente en unos años estos interfaces acaben desembarcando en los escritorios integrándose en los ordenadores personales o computadoras. Apple ha contribuido en gran parte a este pensamiento cuando, hace más de tres meses ya, en su keynote de presentación de Mac OS X Lion, se demostrase que iOS no era un producto más, sino fuente de inspiración para el próximo sistema operativo de escritorio.
Aún conservamos en la retina las demostraciones de LaunchPad, el futuro lanzador de aplicaciones con reminiscencias iPad o Mission Control para cambiar entre aplicaciones. Todo olía a iOS, tanto es así que hasta las barras de desplazamiento desaparecerán en el próximo OS X, como sucede ahora en el iPad y iPhone (que sólo se ven al moverse en la pantalla, mediante una línea fina y oscura).
Visto lo visto, ¿cabe esperar entonces que iOS y Mac OS X se fusionen tarde o temprano? Yo no lo dudaría, y la razón es obvia, mientras que los dispositivos móviles adquieren cada vez mejores prestaciones físicas, los ordenadores de sobremesa evolucionan hacia sistemas más sencillos, donde la capa de hardware y de software estén mucho más alejadas. Entonces, y aquí viene la pregunta del millón, ¿llegará el día en que veamos un iMac multitáctil? Creo que no, analicemos el asunto más detenidamente.
Tal como podréis ver en el siguiente vídeo creado por [R. Clayton Miller]http://10gui.com/), las interfaces táctiles en ordenadores de sobremesa plantean una serie de desventajas difícilmente salvables, la más importante de todas ellas relacionadas con la ergonomía, la dificultad en su uso.
10/GUI from C. Miller on Vimeo.
¿iMac multitáctil? Está claro que no, nuestra posición sobre la silla y junto a la mesa nos impediría un uso eficaz de la pantalla. No hablamos de MacBooks que por su cercanía con el usuario y su inclinación sí podrían aventurarse algún día en el camino de lo táctil.
¿Qué hará entonces Apple para evolucionar su OS X del futuro? La empresa siempre se ha destacado por empujar tecnologías incipientes en lo que tiene que ver con interfaces gráficas de usuario, como ocurrió con su prematura adopción del ratón o su empuje del uso multitáctil a través de sus gadgets de bolsillo. Sin embargo, si avanzamos un poco más en el visionado del vídeo superior veremos que las propuestas de los entendidos están orientadas hacia el uso de complementos (en este caso una zona de detección de movimientos sobre la mesa) que permitirían una mayor cantidad de gestos y movimientos para realizar acciones precisas en el entorno de trabajo.
Está claro que esta tecnología no ha llegado aún, si bien Kinect es una puerta a ella que seguro se desarrollará en el futuro. Sin embargo, no puedo dejar de pensar que todo esto ya está con nosotros bajo otra forma, aunque sea un tanto primitiva; me refiero al Magic Trackpad multitáctil. Si pensamos detenidamente en esta pieza veremos que ya nos aporta todo lo necesario para una interfaz por gestos, sin necesidad de tecnologías caras o pendientes de explotar. Considerando este detalle, quizás lo más necesitado de una revisión sea la propia interfaz visual, es decir, adaptar ventanas y transiciones entre aplicaciones a los movimientos de los dedos.
Numerosas patentes recientes de Apple apuntan a este objetivo. Menús en espiral o con desplazamiento presagian un cambio inminente en la forma en que nos movemos por la pantalla, que requerirán botones más grandes y ventanas más limpias de detalles con un movimiento fluido entre programas. Lo que se avecina en este campo es muy interesante y seguro que veremos algunos cambios drásticos al respecto en Mac OS X Lion.
De modo que, como resumen, nada de iMac multitáctil, pero sí interfaces más adaptadas al manejo de superficies multitáctiles complementarias. ¿Veremos un trackpad para ser usado por ambas manos en breve?