Prácticamente toda la comunidad del software libre se alegró cuando fue anunciado LibreOffice, fork de OpenOffice que no tendría nada que ver con Oracle y cuyo centro será en consecuencia una fundación independiente, pero la situación es un poco más complicada de lo que podría parecer. Una suite de oficina es algo complejo, a pesar de todo el apoyo obtenido OpenOffice en muchísimos aspectos se encuentra todavía lejos de la suite de Microsoft. Y además, los problemas no son nuevos. Siempre fue complicado colaborar con el proyecto, ya que Sun exigía que los desarrolladores cedieran los derechos sobre el código, así podían incluirlo en StarOffice, la versión privativa. En consecuencia, la suite de oficina que se instalaba por defecto en Ubuntu y openSUSE era ya una especie de fork que incluía alguna de estas características.

Claro, todo esto puede ser solucionado con LibreOffice, pero el principal problema es que OpenOffice no ha sido abandonado, sino que Oracle continuará trabajando en su desarrollo. Por ejemplo, el día de ayer anunciaron que participarán en la ciudad de Bruselas de un evento sobre el formato ODF, en el que hablarán de sus planes para el futuro de la suite de aplicaciones. Según Oracle:

Continuaremos desarrollando, mejorando y brindando soporte para OpenOffice como producto open source, trabajando en sus más de 7.5 millones de líneas de código.

Siempre es bueno que existan alternativas, pero quizás hayan realizado el anuncio de LibreOffice antes de lo apropiado. Puede contar con el apoyo de compañías como Google y RedHat, ¿pero cuánto tiempo y dinero aportarán estas compañías a su desarrollo? Mucho menos, seguramente, que el que aparentemente piensa seguir aportando Oracle.

Hace sólo unos días la compañía de Larry Ellison anunció un acuerdo con IBM en el que se comprometían a hacer de OpenJDK la versión principal de la plataforma Java, así que estamos ante dos acercamientos de Oracle a la comunidad open source en tan sólo unos días. Ya sé lo que me dirán, que esto no significa nada, que Oracle es "peor que Microsoft", pero quizás -quizás-, después de todos los problemas, hayan decidido cambiar la política corporativa, romper el silencio y acercarse aunque sea un poco más a la comunidad.

Por su parte, The Document Foundation ha solicitado que Oracle les ceda los derechos de la marca OpenOffice, pero seguramente esto sea demasiado para la compañía de Ellison. Mientras tanto, en una semana LibreOffice fue descargado 80.000 veces y ya está recibiendo muchos aportes de desarrolladores. ¿Creen que lograrán existir las dos versiones sin que sea contraproducente?

Vía: Computer World