Soy de la opinión de que Battlestar Galactica es simplemente la mejor serie de la historia, así de simple. También soy de la opinión de que Caprica es una de las peores series del momento, por varios motivos, siendo uno de ellos la contradictoria pobreza tecnológica que se nos muestra. Claro que por un lado hay autos voladores y realidad virtual (so 1990s...), pero la Inteligencia Artificial es descubierta por milagro error y bueno, en muchos sentidos Caprica no es ni siquiera una Tokio en esteroides. Si hay algo que falta en Caprica es realidad aumentada, como en el animé Dennou Coil (al fin y al cabo, después de tomar elementos de Lain y de Hack, bien podrían haberlo hecho de Dennou...).

La realidad aumentada es uno de los campos más interesantes de la actualidad, al ser una herramienta superadora de la realidad virtual, extendiendo nuestra realidad con elementos de otro mundo en lugar de simplemente ponernos un casco y ver otras realidades. Hoy en día no pasan muchos días sin que surja una nueva aplicación que, por más que no reinvente la rueda, contiene algunas funcionalidades que permiten justamente ampliar nuestros sentidos y aumentar la información que obtenemos naturalmente de nuestro alrededor.

Uno de los mayores problemas que le veo a la realidad aumentada puede ser considerado menor, pero no creo que lo sea y no es nada más y nada menos que el spam. Y no me refiero al correo no deseado, sino a toda información que llega a exceder nuestra capacidad de atención, información que no nos interesa en lo más mínimo pero nos rodea y termina agotándonos (y eso sucede, con y sin realidad aumentada). Puede ser interesante extender la realidad, pero si tras un mal día en el trabajo llegamos a nuestra casa completamente exhaustos, más que ampliar nuestra visión podríamos desear disminuirla.

Eso mismo es lo que están llevando en una Universidad alemana. Lo más increíble no es que lo estén haciendo, sino que es en tiempo real: como pueden ver en la imagen, la aplicación quita elementos de una imagen mientras esta capturada por el dispositivo. Lo tengo que repetir en mayúsculas, discúlpenme: EN TIEMPO REAL. Dibujamos un círculo alrededor de una pelota y puf desaparece o, mejor aún, todo desaparece menos el balón. Imaginen la utilidad que puede tener en campos educativos, para entrenar la atención, para mejorar la performance y permitirnos centrarnos en algún punto en particular eliminando lo innecesario. O bien, por qué no, para crear una alucinación a la Matrix en el mismo lugar donde están parados, mientras ven elementos de la realidad desaparecer uno tras otro.

Puedo haber exagerado ligeramente, pero no he dicho nada que diste mucho de las posibilidades que se abren ante la tecnología actual (que como dije al principio, supera con creces a la de la mitológica Caprica). ¿Y cómo lo hacen? Reduciendo la calidad de la imagen, quitando el objeto y volviendo a mejorar la calidad en sólamente 40 milisegundos, tiempo en el cual no notamos absolutamente nada. Por ahora hay una aplicación (paga) para Windows, pero en la Technische Universität están trabajando en una aplicación gratuita para Android.

Vía: Pop Sci