El Hotel Ryugyong (conocido también como Hotel Ryu-Gyong, Hotel Yu-Kyung o Edificio 105) es un rascacielos sin terminar que se encuentra en Pyongyang. Por impresionante que pueda parecer no es más que una estructura inconclusa con el objetivo de mostrar la majestuosidad de Corea del Norte, pero en un golpe de ironía representa justamente el estado de decadencia actual en el que se encuentra el país.

Destinado a ser una respuesta al hotel Westin Stamford en Singapur (por la empresa surcoreana SsangYong Group) durante la Guerra Fría, empezó su construcción en 1987 por la compañía Baikdoosan Architects & Engineers con la promesa por autoridades locales de leyes relajadas que permitan construír casinos y discotecas si lo consideraban necesario. El objetivo era que termina de construirse en 1989 e inaugurarlo en el Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes (que se celebraría ese año en Pyongyang).

Pero en 1992, con tres años de atraso de la entrega original, los trabajos de construcción fueron detenidos por falta de fondos económicos. Así, en obra negra permaneció sin cambio alguno, con una grua en la cima del edificio que nunca fue retirada. Durante años el gobierno y maquinaria mediática de Corea del Norte mantuvieron una negación total de la existencia del edificio pues básicamente era una vergüenza y un ejemplo de los alcances ridículos de la soberbia de una política totalitaria. Se llegó inclusive a manipular fotografías oficiales de la ciudad para quitar el edificio del panorama y "esconderlo" a la opinión pública internacional.

Durante los años en que el Hotel Ryugyong mantuvo su construcción detenida, se evitaba a toda costa que los turistas que visitan el país y paseaban por Pyongyang puedan fotografiar el edificio (los "guías turísticos" que acompañan de forma obligatoria a cualquier turista en Corea del Norte son empleados del gobierno). También se evitaba el tema aunque era totalmente obvia la presencia de un edificio tan grande.

En 2008 la construcción del Hotel Ryugyong fue reanudada por la compañía egipcia Orascom Group quienes han instalado paneles de vidrio y antenas de telecomunicaciones. Orascom también tiene un acuerdo de 400 millones de dólares con el gobierno de Corea del Norte para desarrollar una red de telefonía móvil 3G. No es del todo claro si planean acabar o no la construcción del hotel.

Muchos creen que es imposible terminar la construcción del Hotel Ryugyong porque la calidad del hormigón usado no es suficiente para sostener el peso que tendría el edificio terminado. El costo estimado de la estructura es de 750 millones de dólares o 2% del Producto Interno Bruto de Corea del Norte. Todo indica que el país no tiene ni tuvo los materiales, el dinero ni los recursos para finalizar la construcción del hotel.

Aún asi es el séptimo edificio más alto del mundo y si lo hubieran terminado a tiempo, se consideraría el hotel más alto del mundo en su momento.

Fotos: Tor Rauden Källstigen, Misha