En esta imagen tomada por el satélite Terra de la NASA se puede ver una inmensa tormenta de arena que literalmente cruza el Mar Rojo desde Sudan y Eritrea hacia Arabia Saudita. Aún así, el tamaño es pequeño si se compara a otras tormentas que han sido capaces de transportar polvo desde África hasta Groenlandia.
De hecho, según un grupo de científicos, las tormentas de arena del Sahara son una fuente importante de minerales escasos para las plantas de la pluvisilva amazónica.