Este pasado viernes día once dio comienzo la edición número diecinueve del Mundial de Fútbol, esa competición deportiva que millones de personas esperaban desde hacía cuatro años y la cual se está caracterizando por varias cosas pero especialmente por una: el molesto zumbido generado por las dichosas vuvuzelas -instrumento típico del país anfitrión de la competición, la República de Sudáfrica, similar a una trompeta- no deja de sonar nunca. Y en este caso nunca es nunca, realmente da lo mismo lo que ocurra, los sudafricanos y foráneos harán sonar las vuvuzelas con toda la fuerza que sus pulmones les permitan.
Diversos equipos y jugadores se han quejado ya enérgicamente de las vuvuzelas llegando incluso a solicitarle varios a la FIFA que se prohíban en los partidos, a lo que estos han respondido con un no rotundo ya que este ancestral instrumento, que ha ido evolucionando con el paso del tiempo, forma parte fundamental de la cultura sudafricana y su prohibición supondría pues una tremenda falta de respeto. Pero no solamente se han quejado los jugadores, muchos aficionados de diversos países que están siguiendo el desarrollo del Mundial vía sus televisores también han puesto el grito en el cielo por el molesto y constante ruido que se escucha en la retransmisión de cualquier partido generado por el instrumento de la discordia.
Personalmente comprendo perfectamente el enfado de los aficionados y equipos, al igual que la decisión de la FIFA de no prohibir las vuvuzelas ya que los sudafricanos tienen todo el derecho del mundo a tocarlas, que para eso son los anfitriones. ¿Estamos entonces en un punto muerto y millones de personas se van a tener que tragar todo el Mundial mal acompañado por el molesto zumbido de las vuvuzelas? Pues si las cadenas de TV que están siguiendo la competición movieran el trasero, no necesariamente, y me explico.
La vuvuzela, al igual que cualquier otro instrumento, tiene una frecuencia fundamental (en este caso es de 233 Hz) así como un timbre característico generado por los armónicos (que en el caso que nos ocupan son de 466 Hz, 932 Hz y 1864 Hz). Estos valores identifican de manera inequívoca a las vuvuzelas, con lo que las cadenas de TV podrían “apagar” el zumbido de las mismas en las retransmisiones sin que se pierda ningún otro matiz relacionado con el sonido (los cánticos de los hinchas mismamente). Por qué esto no se ha hecho todavía no lo tengo claro, pero seguramente las cadenas de televisión no tarden en empezar a filtrar el timbre de las vuvuzelas en las retransmisiones. Por ejemplo la BBC ya ha comentado que está estudiando la posibilidad de hacerlo y si esta lo hace, otras le seguirán de seguro.
De todos modos mientras las cadenas de TV se dicen y no, cualquiera puede filtrar por sí mismo el ruido de las vuvuzelas, tan solo es necesario pasar el audio de la televisión por un ordenador y filtrar las frecuencias anteriormente citadas mediante algún software que permita hacerlo. Esta es una opción pero hay más, por ejemplo muchos televisores cuentan entre sus funciones con ecualizador gracias al cual se pueden controlar las frecuencias.
Así que ya sabes, si estás harto del zumbido de las vuvuzelas, puedes eliminarlo o mitigarlo de manera sustancial, solamente es cuestión de buscar un poco por Internet para dar con la solución que mejor te cuadre. Servidor ya está en ello.