Los modernos aviones de hoy en día tienen un problema fundamental y es la gran cantidad de clableado que necesitan para operar los sistemas de vuelo lo que a su vez genera diversos inconvenientes (más peso, complejidad de mantenimiento etc). ¿Solución? Sustituir esos cables por redes Wi-Fi.
En la actualidad los aparatos de sustentación y de dirección de un avión se controlan mediante un sistema conocido como “fly-by-wire” que traducido viene a decir “vuelo por cable”. Ahora se estudia sustituir esta técnica por otra mucho más moderna conocida como “fly-by-wireless” donde las “órdenes” a los sistemas de control del avión se envían mediante redes inalámbricas.
La medida es muy controvertida ya que falta mejorar la seguridad. Aunque los beneficios de usar un sistema “fly-by-wireless” son claros (reducción de peso con lo que se necesita menos combustible para volar y se facilita el proceso de construcción así como el mantenimiento), también hay problemas. Por un lado está el tema de las interferencias y por el otro el peligro de ataques. Estos son los dos grandes escollos que tendrá que solucionar la tecnología “fly-by-wireless” antes de que los organismos de aviación internacional den de paso su instalación en vuelos comerciales.
De cualquier forma lo interesante es que se sigue investigando el asunto y cuando la tecnología esté lista será implementada, con todos los beneficios que conlleva, por ejemplo para el medio ambiente.
Vía: New Scientist