En un momento en el que justo las grandes discográficas están dudando más que nunca sobre el modelo de negocio de música en streaming impulsado por Spotify, llega otro competidor más para sumarse a la fiesta: Tidal. Quedan todavía unas horas hasta que Jay-Z, que invirtió 57 millones de dólares en comprar Aspiro, la compañía sueca detrás de este servicio, lo presente de manera oficial, pero ya conocemos su propuesta y detalles comerciales.
Audio sin pérdida + vídeo en HD + contenido editorial
La propia web de Tidal afirma que es 'el primer servicio de música en streaming que combina la mejor calidad de audio de Alta Fidelidad, vídeos musicales en Alta Definición y contenido editorial confeccionado por expertos'. Vayamos paso por paso.
¿Cómo de 'audio sin pérdida' es?
En un gráfico en el que, por supuesto, cita a su competencia, Tidal asegura que ofrece audio lossless a 1411 kbps (kilobits por segundo), mientras que Spotify, Rhapsody o Rdio llegan a un máximo de 320 kbps y iTunes hasta los 256 kbps con su AAC.
Si no sabes lo que esto implica a nivel de experiencia de escucha, Tidal lo explica en su propio canal de YouTube con ejemplos bastante ilustrativos.
Videoclips en Alta Definición
No tenemos información todavía sobre los códecs o la compresión de vídeo que ofrecerá en los clips musicales, pero Tidal ya le guiña el ojo a YouTube y Vimeo, no tanto por la calidad de imagen, sino por el audio. "Ninguno es capaz de ofrecer audio sin pérdida", afirman. En papel esto es maravilloso, pero el problema vendrá al analizar los datos que consume un vídeo de YouTube frente a otro de Tidal. ¿Tendremos que limitarnos a usarlo en casa con Wi-Fi? Ofrecerán en su lanzamiento más de 75.000 videoclips.
Contenido editorial y prescripción musical
Tampoco tenemos aún detalles sobre los contenidos que aparecerán en el servicio, pero explican que la idea es ofrecer artículos, reportajes y entrevistas sobre los artistas que están en catálogo para que los usuarios puedan descubrir más sobre ellos. No sabemos si serán firmas invitadas o llegarán a acuerdos con Pitchfork y compañía. Y aquí también hay algo importante. Tidal no solo quiere ofrecerte música en la mejor calidad posible, sino que quiere ayudarte a escoger qué escuchar a través de su sistema de recomendación, englobado en la función Similar. Además, incorpora un motor de reconocimiento a lo Shazam para que conozcas rápidamente lo que estás escuchando y puedas reproducirlo más adelante en calidad premium.
¿Y qué tal el catálogo?
Aseguran tener en catálogo más de 25 millones de canciones, todas ellas adquiridas legalmente mediante acuerdos con sus respectivas discográficas. De hecho, la discografía de Taylor Swift está disponible (salvo su álbum 1989). Sí, la misma que huyó de Spotify a finales de 2014 porque era 'una plaga'.
Si tenemos en cuenta que Spotify o Deezer cuentan con más de 30 millones de canciones en su catálogo, la propuesta de Tidal es algo menor, pero solo eso, 'algo'.
No menos relevante es la disponibilidad: es compatible con 'todos los sistemas operativos' (Tidal se refiere con esto a Mac, Windows, iOS y Android) y, por ahora, está activo en Estados Unidos, Alemania, Australia, Hong Kong y Polonia.
Jay-Z no es el único dueño
A diferencia de servicios como Pandora, que tienen que pagar una cuota mensual por un número determinado de canciones, Tidal se cataloga como una plataforma de streaming interactivo, que se traduce en "los usuarios pueden elegir qué canción escuchar" (en Pandora no, es como una radio). Esta interactividad, por supuesto, tiene un coste más elevado para Tidal (o para Spotify o Deezer, que entran en la misma categoría), que tiene que llegar a acuerdos directamente con artistas o con discográficas. Y aquí el señor Jay-Z parte con ventaja. Al ser una figura tan respetada y poderosa dentro de la industria musical, ha conseguido que nombres de la talla de Madonna, Daft Punk, Kanye West, Rihanna, Jack White, Alicia Keys, deadmau5, Chris Martin (Coldplay) o Beyoncé (ella era bastante obvio, ¿no?) se unan a su proyecto más allá de hacer disponible su catálogo musical. De hecho, todos los que acabamos de citar son también dueños de Tidal con distintas participaciones. Sin duda, esto es un paso importante, no solo porque son grupos afamados y con millones de seguidores, sino por el efecto llamada que tendrán para otras bandas y para el resto de actores de la industria musical.
Precios
Claro, aquí es donde estará la clave, lo que hará que Tidal sea un bonito intento de competencia en el mundo del streaming o una alternativa real y que los usuarios quieran tener. La primera diferencia palpable es que no hay modelo freemium, es decir, Tidal es exclusivamente de pago y presenta dos opciones:
- Tidal HiFi. Por 19,99 dólares al mes, tienes: Audio sin pérdida de Alta Fidelidad (Flac 16-bit), Vídeos musicales en Alta Definición, Contenido editorial exclusivo creado por expertos.
- Tidal Premium. Por 9,99 dólares al mes, tienes: Audio con calidad estándar (máximo 320 kbps), Vídeos musicales en Alta Definición, Contenido editorial exclusivo creado por expertos.
Con todo, lo que está claro es que solo habrá hueco en el mercado del streaming para aquellos que planteen una diferencia y un valor añadido con respecto a lo que ya hay. Indudablemente, Tidal tiene eso, pero, aparte de comprobar cómo funciona, ahora hay que preguntarse: a) ¿Está el mercado del streaming preparado para dar el salto a la alta calidad/fidelidad? y b) ¿Qué clase de usuarios querrán pagar 20 dólares al mes por tener el servicio? ¿Será un público generalista o muy de nicho (audiófilos)?