Imagine que se encuentra ante una vela encendida. Si sopla levemente, la llama de la vela se apagará. Obvio, ¿no? Ahora realice el mismo ejercicio situando una caja —de un tamaño razonable— entre la vela y usted. Tal y como la lógica nos lleva a pensar, el aire se dispersa hacia ambos laterales al impactar […]