La explosión en simultáneo de miles de beepers, también conocidos como pagers o buscapersonas, utilizados por miembros de Hezbolá en Líbano es noticia en todo el mundo. En la tarde del martes 17 de septiembre, a las 15:30, hora local, se produjo el inesperado suceso, que no tardó en viralizarse tras la publicación de múltiples grabaciones de cámaras de videovigilancia registrando algunos de los casos más impactantes.

En un principio se dijo que la explosión de los beepers usados por Hezbolá causó la muerte de 9 personas —incluido un niño— y dejó cerca de 3.000 heridos, con 200 de ellos en estado grave. Con el correr de las horas, el número de fallecidos se habría incrementado a 12, con dos menores de edad en el conteo fatal, y los lesionados en estado delicado habrían llegado a 500.

Desde Hezbolá y el gobierno de Líbano señalaron de inmediato a Israel como responsable de orquestar un ataque a través de sus servicios de inteligencia para detonar los beepers. Tanto las autoridades como las Fuerzas de Defensa israelíes no se han pronunciado al respecto, aunque los indicios en esa dirección parecen ser cada vez más fuertes.

Estados Unidos, el principal aliado de Israel, se ha despegado de cualquier participación. Según publica el periodista Román Lejtman, el Departamento de Estado norteamericano no avaló la aparente operación israelí y negó vínculos con ella. "EE. UU. no estuvo involucrado en el ataque en el Líbano", dijo el portavoz Matthew Miller.

Miles de beepers de Hezbolá explotaron en simultáneo

Miles de beepers de Hezbolá explotaron en simultáneo
Los pagers fueron especialmente populares en los '80 y '90. Foto: Der Sascha, vía Wikimedia Commons (GFDL CC-BY-SA).

Los buscapersonas se popularizaron a partir de los años ochenta y alcanzaron su pico en los noventa de la mano de marcas como Motorola, mucho antes de que los mensajes de texto y el correo electrónico se volvieran masivos. Desde los años 2000 en adelante, su uso ha ido en declive debido a los enormes avances que ha logrado el sector de las telecomunicaciones.

Sin embargo, los beepers se han convertido en una pieza crucial para las comunicaciones de Hezbolá, puesto que permiten recibir órdenes o notificaciones de forma sencilla y prácticamente imposible de rastrear. O al menos eso era lo que se creía hasta ayer.

Estos dispositivos funcionan a través de señales de radio y soportan distintos protocolos de conexión directa. En el caso específico de Hezbolá, los beepers ganaron mayor relevancia desde que en febrero de este año los líderes del grupo instaron a sus miembros a dejar de utilizar smartphones debido a que estos podrían ser hackeados o intervenidos por la inteligencia de Israel.

Las explosiones que ayer se registraron en simultáneo en Líbano se produjeron en equipos de la marca taiwanesa Gold Apollo. Según reporta The New York Times, la mayoría de los buscapersonas afectados eran del modelo AR924, aunque también había otras versiones. Reuters indica que la firma asiática negó su involucramiento en cualquier operación y remarcó que los beepers que usaba Hezbolá los fabricó bajo licencia la empresa BAC Consulting, con sede en Budapest, Hungría.

¿Cómo se produjo el aparente ataque de Israel?

Miles de beepers de Hezbolá explotaron en simultáneo | explosión de beepers (buscapersonas) en Líbano
Uno de los beepers de Hezbolá alcanzados por la explosión. Foto vía Infobae.

Todavía hay muchas dudas con respecto a cómo pudo haberse producido esta aparente operación de Israel para atacar a integrantes de Hezbolá en Líbano a través de sus beepers. La hipótesis con más fuerza indica que los servicios de inteligencia israelí se habrían infiltrado en la cadena de suministros y habrían realizado modificaciones en los dispositivos para dotarlos de explosivos junto a sus baterías.

Según las fuentes del NYT, los buscapersonas fueron alterados para introducir entre 1 y 2 onzas de explosivos —unos 28 a 57 gramos—, junto con un interruptor que se podía activar de forma remota para su detonación. Reuters, en tanto, dice que podrían haber sido no más de 3 gramos de material en cada aparato.

El explosivo utilizado sería PETN, indica Sky News Arabia. Este destaca por ser estable pero sensible al calor y la fricción. Sea como sea, si todo esto se confirma, estamos hablando de una operación extremadamente compleja y cuya ejecución pudo haber demandado meses o años.

The Wall Street Journal publica que también se especuló con la implantación de un malware que pudiera haber sobrecalentado las baterías de los beepers para desatar las explosiones. No obstante, el escenario de una detonación remota más directa es el que tiene más fuerza en estos momentos.

Incógnitas sobre la mesa

Aún no se sabe cuál pudo ser el método elegido para la explosión en simultáneo de los miles de beepers usados por Hezbolá. Se dice que Israel pudo haber obtenido tanto el identificador de los equipos como su frecuencia de operación al modificarlos, y que a partir de allí se podría haber programado la señal o el "mensaje" para activarlos. Pero esto aún es un supuesto.

Sí se ha informado que todos los buscapersonas afectados sonaron varias veces antes de su explosión, y que algunos de sus usuarios notaron que estaban sobrecalentando y se deshicieron de ellos antes de que estallaran.

Lo que todavía no se sabe es cuándo se produjo la compra de los beepers en cuestión, ni desde cuándo estaban en manos de Hezbolá. Tanto el NYT como el WSJ indican que el cargamento de equipos era nuevo y que estaba en manos del grupo desde hacía pocos días, mientras que Reuters y otros medios sostienen que, en realidad, los pagers alterados se usaron durante varios meses sin despertar sospechas.