Solo en Casa es considerado el clásico de Navidad más popular de todos los tiempos. Estrenada en 1990, la película se convirtió en la comedia más taquillera de la historia hasta ese momento, recaudando 477 millones de dólares a nivel mundial. Lo cual es todavía más sorprendente cuando consideramos que su presupuesto fue de solo 18 millones.

Debido a su inmenso éxito, cada elemento de Solo en Casa se convirtió en un ícono de la cultura. La adorable interpretación de Macaulay Culkin, en contraste con un aterrador Joe Pesci. La conmovedora banda sonora de John Williams y por supuesto la enorme casa que el protagonista convierte en una trampa mortal para los bandidos que buscaban ingresar a ella.

Solía ser posible vivir en la hermosa casa de los McCallister sin tener que ser millonario. En el 2023 estuvo disponible en la plataforma de alojamiento Airbnb, como parte de una campaña para recaudar fondos para el hospital de niños La Rabida en Chicago. El precio fue de 25$ la noche durante las fiestas navideñas del 2023. Ahora la famosa casa de Solo en Casa ha entrado en el mercado, con un precio algo elevado.

Precio y cómo se ve por dentro la casa de Solo en Casa

El New York Times reportó que la casa de Solo en Casa se encuentra en venta actualmente. Luego de haber sido vendida por 1,585 millones de dólares en el 2012, la inflación hizo lo suyo para que en el 2024 cueste 5,25 millones. Está ubicada en Winnetka, un suburbio de Chicago.

Podríamos decir que es una ganga si consideramos que el Plaza Hotel, en donde se filmó la secuela de Solo en Casa, fue vendido en el 2018 por unos 600 millones de dólares. La casa original de la primera película representa una oportunidad mucho más asequible de adueñarse de un pedazo invaluable de la historia del cine.

La secuela de Solo en Casa también fue bastante exitosa económicamente, aunque no tanto como la primera. Aun así, el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, afirmó que su aparición fue una de las razones detrás del éxito del filme. Esto ocurrió luego de que el director de la cinta, Chris Columbus, afirmara que Trump, quien en aquel entonces era el dueño del Plaza Hotel, exigió aparecer en la película como condición para rentarles la propiedad. Los cineastas no estaban muy entusiasmados por su aparición, pero accedieron. También indicó que el cameo fue todo un éxito cuando proyectaron la película por primera vez, motivando a la audiencia a vitorear.

Sin duda la película resulta más graciosa hoy en día a causa de ese cameo.

Lo que sí resulta un poco decepcionante es que, por dentro, la casa de Solo en Casa se ve completamente distinta de como la recordamos. El dueño parece odiar la diversión, porque en vez de mantener las decoraciones de Navidad puestas todo el año, como sería lógico si vives en la casa de Solo en Casa, optó por una decoración genérica y aburrida.

En la película.
Actualmente.

Esperemos que el nuevo dueño tenga mejores sensibilidades cinematográficas.

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: