Mercedes-Benz comenzó a integrar robots humanoides en una de sus fábricas para efectuar tareas exigentes o aburridas. El gigante alemán firmó un acuerdo con Apptronik, un conocido fabricante de robots, quien proveerá múltiples unidades de su modelo Apollo para una prueba piloto en la planta de Hungría.
Apollo, un robot bípedo con aspecto amigable, entregará piezas a la línea de producción para que los empleados efectúen el montaje. Mercedes-Benz también lo utilizará para entregar los contenedores de piezas equipadas más adelante. El robot puede transportar cargas de hasta 25 kilogramos y cuenta con funciones que le permiten adaptarse a su entorno.
De acuerdo con un comunicado de Apptronik, la incorporación de robots humanoides a las fábricas ayudaría a Mercedes-Benz, ya que no necesitarían rediseñar los espacios. Apollo puede trasladarse en entornos planeados para seres humanos y cuenta con sensores para sortear obstáculos y evitar impactos. El robot se controla a través de un software en donde se designan las tareas a realizar, el cual puede ejecutarse desde un ordenador o dispositivo móvil.
La asociación entre Apptronik y Mercedes-Benz tiene como meta automatizar la cadena de producción. Jeff Cárdenas, director ejecutivo de la empresa de robótica, declaró que Mercedes-Benz utilizará a Apollo en tareas manuales de baja calificación y físicamente exigentes. Al igual que Figure y su robot impulsado por inteligencia artificial, el objetivo a futuro es que los cíborgs se encarguen de las actividades aburridas o pesadas para que los humanos "vivan más felices".
En el caso de Mercedes-Benz, el fabricante eligió su fábrica de Hungría para llevar a cabo la prueba. La decisión obedece a dos razones: escasez de mano de obra confiable y sindicatos más accesibles. La empresa aseguró que los robots no le quitarán el empleo a los trabajadores humanos.
Los robots no reemplazarán a los trabajadores de Mercedes-Benz (por ahora)
Si bien la automatización ha estado presente desde hace décadas, los robots de Apptronik y Figure representan un cambio de paradigma. Apollo y Figure 01 han sido diseñados para integrarse en las fábricas y trabajar junto a humanos. Se trata de robots colaborativos capaces de efectuar labores repetitivas a través de programación previa o inteligencia artificial.
En el caso de Apollo, el robot tiene características de un trabajador promedio: mide 1,72 m y pesa 72 kilogramos. Apptronik comenta que fue diseñado para operar en espacios industriales y cuenta con una arquitectura de control de fuerza que mantiene una operación segura alrededor de las personas. A diferencia del Figure 01 — que parece más un Terminator — Apollo posee un aspecto más amigable para conseguir la aprobación del personal.
"Tendremos que convencer a los trabajadores y a la dirección", dijo Jörg Burzer, jefe de producción de Mercedes-Benz. "Para construir los coches más deseables, evolucionamos continuamente el futuro de la producción de automóviles: los avances en robótica e inteligencia artificial también abren nuevas oportunidades para nosotros."
Burzer, quien es miembro del Consejo de Administración del Grupo Mercedes-Benz, añadió que el acuerdo les permitirá explorar las posibilidades de la robótica para apoyar a los trabajadores. "Queremos comprender el potencial que tienen tanto la robótica como la fabricación de automóviles para llenar los vacíos laborales en áreas como el trabajo poco calificado, repetitivo y físicamente exigente", dijo.
Mercedes-Benz no es el único que apuesta por los robots humanoides. Hace unos meses, BMW firmó un acuerdo con Figure para integrar a sus robots en la cadena de producción automotriz. Tras una fase de análisis, los Figure 01 trabajarán con los empleados de la fábrica de Carolina del Sur, Estados Unidos.