Lenovo ha puesto sobre la mesa una problemática sobre los Chromebooks que lleva algunos años circulando. El fabricante asiático declaró que los portátiles no son rentables y representan un peligro para el planeta, aunque eso no significa que dejarán de venderlos.

Durante su participación durante el Foro Canalys de Asia Pacífico, Che Min Tiu, director de operaciones de Lenovo, comentó que los Chromebooks no ofrecen beneficios económicos para la compañía. “No sé quién obtiene las ganancias. Todo el mundo tiene dificultades para venderlos”, mencionó. Sumado a eso, Tiu dijo que no son amigables al medioambiente, ya que reciclar los materiales no es sencillo.

Las declaraciones de Lenovo llegan después de sufrir un revés en las ventas de Chromebooks durante el tercer trimestre del año. De acuerdo con cifras de IDC, el fabricante registró una caída del 20 % y consiguió enviar apenas 600.000 portátiles. Lenovo ocupa el cuarto puesto en la cuota de mercado de Chromebooks, siendo superado por Dell, HP y Acer, este último con una cómoda ventaja de casi un 30 %.

El mercado de los Chromebook está valuado en más de 30.000 millones de dólares y analistas esperan que crezca un 8 % durante los próximos seis años. Si bien su origen se remonta a 2011, los portátiles de Google tomaron por asalto el mundo durante la pandemia de 2020. Su popularidad se incrementó durante los días del confinamiento, en donde estudiantes y empleados buscaban una solución económica para el teletrabajo.

La vuelta al ritmo normal derivó en una nueva caída en la venta de ordenadores, lo cual impactó directamente a Lenovo y otros fabricantes. Las críticas de Tiu también hacen eco a otro de los problemas de estos portátiles. Los Chromebook no están diseñados para durar y representan una amenaza para el planeta.

Los Chromebooks y su impacto en el medioambiente

Chromebook de Lenovo

Un reporte del Fondo de Educación PIRG de EE. UU. destacó que los 31 millones de Chromebooks que se vendieron durante el primer año de la pandemia representan 8,9 millones de toneladas de emisiones de CO₂. De igual forma, los portátiles tienen una fecha de vencimiento en la que ya no recibirán más actualizaciones de software, lo que les impide acceder a algunas webs de forma segura.

“Esperamos que la leche caduque, pero no los ordenadores portátiles”, mencionó Lucas Gutterman, director de la campaña Diseñado para Durar. “Las fechas de vencimiento se basan en la certificación de un modelo determinado, no en la fecha de compra. Esto significa que los consumidores o las escuelas pueden comprar una Chromebook usada o reacondicionada pensando que están obteniendo una buena oferta, solo para sorprenderse cuando su nueva computadora portátil caduca después de un año.”

Ante las críticas, Google anunció que extenderá las actualizaciones automáticas de software para los Chromebooks hasta por 10 años. Aunque esta política aplica para los modelos lanzados a partir de 2021, cualquiera que haya comprado uno durante la pandemia o antes podrá ampliar el periodo de soporte una vez que concluya el plazo original.

Pese a que los Chromebook no representan grandes ganancias y son difíciles de reciclar, Lenovo no les dará la espalda. “Creo que seguiremos vendiendo el Chromebook porque hay demanda”, dijo Che Min Tiu, quien señaló que el sector de educación es el consumidor principal de estos equipos.