Después de tantas películas de terror, hemos aprendido que vivir en una mansión encantada tal vez es una mala idea, sobre todo si eres creyente de dimensiones paranormales. Sin embargo, a pesar de todos los papeles que ha interpretado, el actor Kevin Bacon no parece tener esta misma escuela. En 2020, Bacon decidió mudarse a una casa embrujada junto a su esposa, Kyra Sedgwick, actriz de producciones de terror y otros géneros.

La parcela en la que Bacon y Sedgwick decidieron establecer su hogar tenía un pasado bastante turbio. Tanto así que el actor llegó a pensar por momentos que sería poseído por algún espíritu de la zona, según revela al pódcast Literally! With Rob Lowe. Todo comenzó después de que el propietario del inmueble se negase a vender la casa en un primer momento. Según el actor, fue allí cuando se le reveló que la casa estaba embrujada, por lo que el vendedor tenía miedo de que pudiese causar daños graves tras una posesión inesperada.

Tras varias discusiones, el hombre accedió a vender la casa. Eso sí, antes de hacerlo, dejó una condición: solo lo haría si Kevin Bacon y Kyra Sedgwick prometían demoler el lugar en menos de un mes.

El turbio pasado de la casa embrujada de Kevin Bacon y Kyra Sedgwick

Kevin Bacon y Kyra Sedgwick, dueños de la casa embrujada

Bacon estaba totalmente decidido a demoler la casa. Sin embargo, tras los primeros momentos en ella, comenta que sitió una fascinación especial por el inmueble. Desde hermosas tablas de pino antiguas, hasta barandillas de madera totalmente únicas. La tentación de quedarse con algunas de estas piezas fue bastante fuerte, pero más lo era la voluntad de Kyra Sedgwick por dejar el terror en el pasado.

Lamentablemente, el inmueble fue derribado. Tampoco se guardaron partes de la estructura. Después de todo, tanto Kevin Bacon como Kyra Sedgwick tenían miedo de acabar siendo poseídos por un espíritu maligno.

¿Pero cuál era la turbia historia detrás de la casa embrujada de Kevin Bacon? Según revela el actor tras varias investigaciones, el pasado del inmueble está ligada a la peor faceta del colonialismo. Fue en el siglo XVIII cuando un nativo americano fue asesinado en el recinto por un soldado inglés. Tras esto, cosas extrañas comenzaron a suceder, y el propietario anterior incluso llevó a varios equipos cazafantasmas para liberar la zona.

Aunque la historia tiene más de tres siglos, sus consecuencias siguen bastante vigentes en el imaginario colectivo. Sin embargo, ahora los fantasmas de esta antigua casa descansan en algún vertedero de basura. En su lugar, el nuevo y reluciente hogar de los Bacon-Sedgwick toma su antiguo puesto.