La Fórmula 1 vive una especie de época dorada. Y Electronic Arts, gracias a la compra de Codemasters que anunció a finales de 2020, está dispuesta a sacar todo el rédito posible de ello. La compañía ha lanzado este año F1 23, el título oficial de la categoría reina del automovilismo. Una nueva edición que, a simple vista, no parece ser trascendental en el historial de la saga. De hecho, esa fue mi impresión cuando comenzaron a revelarse los primeros detalles. Sin embargo, tras haberlo probado durante días, os aseguro que, bajo esa apariencia, en realidad he encontrado mucho más de lo que inicialmente parecía.

Uno de los principales cambios en esta nueva versión, según EA, es el comportamiento de los monoplazas. F1 22, recordemos, recibió bastantes críticas en este sentido. Y, en lugar de entrar en detalles técnicos, permítanme simplemente poner algunos ejemplos:

  • La tracción era en muchas ocasiones innecesariamente baja. Esto hacía casi obligatorio, entre otras cosas, recurrir al short-shifting a la salida de cualquier curva de media o baja velocidad y, en ocasiones, llegando incluso a 4ª o 5ª marcha antes de poder pisar el pedal de aceleración a fondo –si juegas con el control de tracción inactivo–.
  • En caso de sobrepasar el límite del agarre, F1 22 apenas dejaba margen para recuperar el coche. Era común pasar de tener todo el agarre a, de repente, perder el control por completo. Sin punto intermedio en el que poder contravolantear. Y el feedback, además, no siempre advertía de esa cercanía al límite, por lo que en ciertas ocasiones se convertía más en una carrera de supervivencia que de conducción.
  • Por otra parte, si ibas a curvas como Copse (Silverstone), nos encontramos con que resultabas imposible hacerla a fondo –salvo que configures un setup con downforce irrealmente alto y sacrifiques tiempo por vuelta en el resto del circuito–. Una clara falta de correlación con la realidad, pues los F1 de la temporada pasada sí hacían dicha curva a fondo sin problemas.
F1 23

Podría enumerar más ejemplos como estos –en los que el comportamiento del monoplaza no era el que uno esperaba encontrar–, pero, al final, todo lleva a una misma conclusión: las físicas de F1 22 tenían margen de mejora y, por consiguiente, muchos jugadores estaban descontentos con esta situación –incluso simracers profesionales o pilotos de eSports–.

Ahora bien: ¿ocurre lo mismo con F1 23? Electronic Arts aseguró en la presentación del título que habían hecho un gran esfuerzo por mejorar las físicas de los monoplazas e incluso habían pedido feedback a los equipos oficiales del campeonato para hacer que el comportamiento fuese lo más fiel a la realidad posible. Pero todos sabemos por experiencia que lo que afirma una desarrolladora no siempre casa con lo que acaban sintiendo los jugadores. ¿Es este el caso?

F1 23

Los monoplazas se comportan bastante diferente en F1 23 (y eso es una buena noticia)

Para descubrirlo, arranqué una crono en el Circuit de Catalunya. Nada de setup personalizado por el momento. Quería ver rápidamente si había realmente diferencia con el título anterior. ¡Y vaya si lo noté! Bastó con llegar a la segunda curva para sentir los cambios en la tracción del coche. En la salida de esa segunda curva, justo antes de entrar en la tercera, resultaba fácil perder el coche si tocabas el piano o acelerabas demasiado deprisa sin el control de tracción activo. En F1 23, eso también puede llegar a ocurrir, pero sucede de una manera más lógica y predecible. Y, en caso de suceder, tienes cierto margen de corrección. En el juego anterior, si perdías el control, estabas vendido.

Llegué a la curva cinco, donde salir rápido es fundamental para no perder tiempo en la recta que sigue. Aquí descubrí otra de las mejoras más destacables de F1 23: te ofrece más margen e información para contravolantear y mantener el coche en la trazada. Esto es extremadamente útil no solo para evitar accidentes o no tener que recurrir a flashbacks; si se perfecciona, ese extra de control sobre el deslizamiento te puede permitir incluso ganar tiempo a la salida de la curva o incluso mientras haces rotar el coche.

Durante la vuelta también noté algo interesante: no hace falta llevar el short-shifting tan lejos como en F1 22 a la salida de las curvas lentas. Esto es fácilmente apreciable, por ejemplo, en la curva 10, donde siempre resulta fácil perder el control del coche si no tienes el tacto suficiente.

Uno puede pensar que todos estos cambios han hecho que F1 23 sea más fácil de jugar que F1 22. Y, aunque es cierto que en ciertas situaciones es más difícil perder el coche que antes, creo que no es la forma correcta de explicar el fondo de todos estos cambios. Las nuevas físicas han hecho que el comportamiento de los coches sea más real, lógico para la mente humana y, también, más predecible; pero llevar el coche al límite sigue siendo un reto. Simplemente, ahora tiene más sentido lo que ocurre en el videojuego. Para mi, insisto, solo este cambio hace que el nuevo título sea un salto mayúsculo.

F1 23

Hola, F1 World

EA ha hecho más cambios en F1 23. Destaca, por ejemplo, el nuevo F1 World. Es una especie de hub en el que ahora están aglutinados diversos modos de juego tradicionales –como contrarreloj, Grand Prix individual, modos online, etc.– y una nueva serie de eventos rotativos que, en ocasiones, están relacionados con la vida real.

No obstante, lo más novedoso de F1 World es que ahora utilizas un mismo coche en muchos de esos modos; y ese coche se puede mejorar en base a mejoras que vas obteniendo conforme juegas. También puedes mejorar el equipo que rodea a ese coche, el cual tiene impacto determinado durante un número concreto de carreras (hasta que termine el contrato fijado).

La idea de base de F1 World es un acierto en mi opinión. Poder mejorar tanto el coche como el equipo añade una variable más a las partidas. Y que haya eventos rotativos da motivos a los jugadores para seguir accediendo a estos modos a lo largo de los 12 meses de temporada. No obstante, aunque los modos en sí traen muchas ideas buenas, sí siento que el apartado F1 World es un popurrí de diferentes modos de juego –cada uno con su dinámica de juego– que se podría simplificar o estructurar mejor.

En relación a los modos de juego online, el sistema de crossplay ahora está disponible desde el primer momento y, además, se expande a más modos de juego –incluyendo los modos clasificatorios–. En F1 22, recordemos, no era posible jugar partidas clasificatorias con crossplay.

F1 23

Braking Point 2 vuelve, así como las voces de Antonio Lobato y Pedro de la Rosa

Otra de las grandes novedades de F1 23 es la vuelta del modo Braking Point, que ahora pone en el epicentro al equipo Konnersport y mantiene a algunos de los protagonistas del modo Braking Point de F1 21. Es difícil calzar un modo historia en un juego como F1, pero la compañía ha logrado volver a poner sobre la mesa una narrativa que interesa y se disfruta jugando.

F1 23 también trae consigo una nueva distancia de carrera (35%) que es todo un acierto. Un punto dulce entre el 20% (escaso para jugar con las estrategias) y el 50%, que en ocasiones se puede hacer excesivamente largo. También son bienvenidos los nuevos circuitos (como Las Vegas) y las las banderas rojas, que ahora pueden aparecer en caso de ser necesario y permiten cambiar por completo la estrategia de la carrera de manera repentina.

Por último, F1 23 trae de vuelta los comentarios de Antonio Lobato y Pedro de la Rosa en España, lo cual, personalmente, me produce diversas emociones. Por un lado, supone un extra de inmersión innegable, pues sus voces son icónicas en la F1 española. Por otro, y esto es más personal, me resulta inevitable retroceder en el tiempo cada vez que arranca un GP y escucho sus voces en el juego. Muchos recordarán que algunos de los títulos de F1 para PS2 contaron también con los comentarios de Lobato. Títulos a los que, personalmente, guardo un especial cariño.

F1 23

¿Merece la pena F1 23?

F1 23 es un paso hacia delante mucho más notorio de lo que podía parecer en un primer momento. Novedades como F1 World, la vuelta de Braking Point, la distancia del 35% o los nuevos circuitos son sin duda bienvenidas. Pero, en mi opinión, lo más importante es cómo se comportan ahora los monoplazas. Es más realista, se tiene más control sobre el coche y, sobre todo, se disfruta más. Especialmente si usas volante + cockpit. No exagero al afirmar que este es uno de los mejores F1 que Electronic Arts / Codemasters han hecho hasta la fecha. Y lo dice una persona que, año tras año, pasa decenas horas jugando a cada entrega que sale de esta saga.