Todo viaje requiere una preparación previa. Más que nada para evitar sorpresas o imprevistos. La maleta bien empaquetada. La documentación a buen recaudo pero disponible por si te la piden en la aduana. Dinero, en metálico o en tarjeta, para sufragar los gastos. Un mínimo de planificación sobre a dónde vas a ir, qué vuelo has de tomar y dónde te vas a hospedar. Y, cómo no, llevar encima tu teléfono móvil. Eso sí. Cuidado si vas a viajar sin roaming gratis o dentro de tu contrato.
Cuando viajas fuera de las fronteras de tu país, puedes encontrarte con un problema si necesitas utilizar tu teléfono. Algo habitual para hacer llamadas, mandar mensajes, consultar una dirección en el mapa o hasta para mostrar tu tarjeta de embarque. No todos los países tienen acuerdos de colaboración en lo que a comunicaciones se refiere. El tan temido roaming o itinerancia. Según a dónde viajes, si te conectas a internet desde tu móvil tendrás que pagar un sobrecoste nada agradable.
Por suerte no está todo perdido. Siguiendo estos sencillos consejos, podrás viajar sin roaming y sin preocupaciones. Solo es cuestión de informarte de las condiciones de tu plan de datos móviles, saber si tu viaje tiene un destino que no implica un coste adicional en tu factura telefónica y alguna que otra solución más que evitará que tengas problemas a la vez que puedes disfrutar de tus aplicaciones favoritas y de tu teléfono inteligente allá donde vayas.
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Compra una tarjeta eSIM internacional, conéctate a internet en tus viajes y evita cargos exagerados por roaming de datos.
¿Qué tarifa tengo contratada?
Antes de hacer el viaje, conviene averiguar en qué países puedes usar tu teléfono y si implica un coste añadido al que ya pagas todos los meses. Normalmente esa información se encuentra en la página oficial de tu operadora de telefonía, entrando en tu perfil de usuario.
Y en lo que a roaming se refiere, averigua qué países se incluyen en tu tarifa. Por ejemplo, dentro de la Unión Europea, “no tienes que pagar recargos adicionales por usar tu teléfono móvil. Esto se conoce como itinerancia o roaming sin recargos o itinerancia como en casa”. El contrato que tengas se debe aplicar igualmente dentro de territorio europeo. Esto incluye también Islandia, Liechtenstein o Noruega. Y Reino Unido, a pesar del Brexit.
Pero ten en cuenta que si viajas a Estados Unidos, México, Japón, Tailandia… Vamos, que si viajas a cualquier otra parte del mundo, cuidado con viajar sin roaming. Esto también se aplica a usar tu teléfono durante un viaje en barco o en avión. En estos casos, puede que la conexión implique usar satélite y acabes por pagar un sobrecoste. En cualquier caso, comprueba el sobrecoste de las llamadas y datos móviles en esos países.
Conectarte a puntos WiFi gratuitos
Si no es posible acceder a internet vía datos móviles, siempre podemos acudir a las redes WiFi que encontremos durante nuestro viaje. Sin embargo, hay mucho a tener en cuenta si optamos por esta solución. Cada vez es más frecuente encontrar WiFi gratis en bares y cafeterías, hoteles y otros lugares públicos como aeropuertos, estaciones de tren, bibliotecas o museos.
Pero hay que tomar precauciones al acceder a puntos WiFi abiertos. Para empezar, desconfía de ellos, ya que no sabes si son realmente seguros o si alguien puede interceptar tus comunicaciones. Es decir, si estás conectado a un WiFi público, no deberías hacer nada relacionado con: compras online, acceder a tu banco online, compartir contraseñas o datos personales…
Para usar los puntos WiFi abiertos con seguridad procura no facilitar información personal. Y si lo necesitas, utiliza aplicaciones de seguridad como las redes VPN. Las hay gratuitas y de pago. Y si eres usuario de iPhone, al contratar iCloud+ viene de ser una VPN para cifrar tus comunicaciones.
Sin embargo, depender de las conexiones WiFi a tu alrededor tiene sus inconvenientes, más allá de la seguridad. La disponibilidad. No siempre hay un punto de conexión cerca. Puede que lo necesites en un momento concreto y no esté a tu alcance. En cambio, la cobertura móvil suele ser más fiable. O, al menos, está más presente que las redes inalámbricas WiFi.
Las tarjetas eSIM internacionales
Si vas a viajar sin roaming gratis, o incluido en tu contrato, y no quieres tener que buscar puntos WiFi allá donde vayas, ¿cómo hacerlo para conectar tu teléfono móvil a internet si viajas al otro lado del mundo? Para eso están las tarjetas eSIM internacionales.
Para hacer llamadas o para conectarte a internet con tu teléfono inteligente, necesitas introducirle una tarjeta llamada SIM o tarjeta SIM. Es imprescindible para que tu teléfono acceda a las antenas de telefonía de alrededor para enviar y recibir datos. El problema está en que esa tarjeta sirve para un territorio concreto. Si viajas a otro país, necesitarás otra SIM.
Desde no hace mucho, esa tarjeta SIM física tiene una compañera virtual. Se conoce como eSIM y no necesita que abras una ranura para introducirla. Se configura directamente en el teléfono, ya sea un iPhone con iOS o un Samsung, Xiaomi, OPPO o OnePlus con Android. Puedes usar una eSIM por separado o combinarla con una SIM física.
Y si viajas al extranjero, puedes contratar una eSIM internacional para evitar el sobrecargo en el roaming. Tan fácil como suena. La compras online, la configuras en un minuto y ya está. Cuando viajes, podrás seguir enviando mensajes o usando tus aplicaciones con un plan de datos de ese país.
Cómo contratar una eSIM de datos para Estados Unidos
Proveedores como Holafly te permiten comprar una tarjeta eSIM internacional en un instante. Tú decides a dónde vas a viajar, cuántos días vas a estar ahí y qué necesidades tienes en cuanto a tu plan de datos móviles. Luego solo tienes que configurar la eSIM en tu teléfono y empezar a usarla cuando llegues a tu destino. Y entre sus peculiaridades, te conserva el número de WhatsApp para que puedas seguir usándolo durante tu viaje.
Pongamos como ejemplo que vamos a viajar a Estados Unidos. Para comprar una eSIM en Holafly empezaremos indicando a dónde queremos ir. Puede ser un país o un continente. En el caso de Estados Unidos, si te fijas en la ficha técnica que ofrece Holafly verás que tendrás cobertura 4G y LTE a través de las compañías estadounidenses AT&T y T-Mobile. El paquete de datos disponible es ilimitado, prepago y da cobertura en las principales ciudades.
Lo único que tienes que hacer es elegir durante cuántos días necesitas utilizar la eSIM. Pueden ser 5, 7, 10, 15, 30, 60 o incluso 90 días. Es decir, tres meses. En función de los días, el precio será uno u otro. Y puedes verlo en dólares USA pero también en euros o en dólares mexicanos.
Una vez has comprobado que tu teléfono admite eSIM, la compramos. Luego sólo tendrás que escanear el código QR que muestra el formulario de compra. Te indicará qué tienes que hacer para activar la eSIM. Así de fácil. Se acabó viajar sin roaming. Con una eSIM internacional podrás seguir navegando como si estuvieras en casa.
