Revive Machines, un equipo de entusiastas en Polonia está trabajando en revivir el Atari 800XL, el mítico ordenador que fue lanzado en 1983 y que se convirtió en uno de los equipos más populares de aquellos años.
El RM 800XL, como la llama Revive Machines no es una restauración de equipos ya existentes. Sino que fabrican desde cero el ordenador pero con componentes internos modernos, pero manteniendo su diseño clásico. Además, retienen todos los puertos originales pero sumando salida HDMI, USB-A y USB-C.
El objetivo es poder conectar cartuchos originales del Atari 800XL y que puedan funcionar, pero también poder descargar ROMs de internet y que se ejecuten sin problema en el ordenador por medio de un emulador de 8-bits.
El RM 800XL es un Atari 800XL modernizado
Los componentes internos del RM 800XL incluyen procesador RISC y FPGA modernos. Tiene el puerto para cartuchos en la parte superior del ordenador, exactamente igual al Atari 800XL, dos puertos clásicos de 9-pins, dos puertos USB-A para conectar mandos para videojuegos. Un puerto SIO para periféricos 100 % compatible con el original, un puerto paralelo PBI para dispositivos externos originales, un puerto de monitor original. También puerto HDMI para conectarlo a una TV o monitores modernos, un USB-A extra para memoria externa, y un puerto USB-C de alimentación de energía.
De momento se desconoce el precio y la fecha en que empiezan las ventas o reservas de esta nueva versión del Atari 800XL. Tampoco es claro en qué países estará disponible, pero suponemos que las primeras entregas se harán en Europa antes de ir a otros mercados internacionales.
¿Por qué el Atari 800XL fue tan importante y popular?
Lanzada en 1983 como la sucesora del Atari 800, el Atari 800XL se convirtió en uno de los ordenadores personales más vendidos de la época. Sin duda el más exitoso de la compañía durante la priemra mitad de la década de los 80. Tenía un diseño totalmente diferente a lo que se podía ver en la época, dejando a un lado el plástico beige, con formas y colores muy modernos.
Además tenía mucha facilidad para ser usada como consola de videojuegos. Entrada superior para cartuchos y puertos para conectar dos joysticks, que ya eran populares gracias a la Atari 2600.
El Atari 800XL incorporaba Atari Basic XL —versión mejorada del Atari Basic lanzado en 1981— para poder programar. Al ser un interpretador y no un compilador, cualquier persona podía analizar y modificar el código fuente de cualquier software, aplicación o videojuego.
Gracias a esto último, el ordenador fue una verdadera introducción a la programación para Miles de personas, incluyéndome. La posibilidad de analizar el código fuente de cualquier videojuego que jugábamos por horas y entender cómo funcionaba era absolutamente apasionante.
Aunque el Atari 800XL estuvo bien posicionado en términos de características y precio, tuvo dos grandes problemas a nivel comercial. Durante su puesta a la venta, la compañía estaba haciendo la transición en la fabricación de dispositivos de Estados Unidos a Asia. Esto generó decenas de problemas logísticos que los puso en desventaja durante las fiestas de fin de año de 1983. Lo que originalmente sería un regalo de Navidad super popular, se convirtió en un dolor de cabeza para muchos padres, ya que era imposible conseguirla. No se logró fabricar tantas como muchos esperaban. En cambio, la Commodore 64 estaba disponible en todas las tiendas.
Atari también se metió en una guerra de precios con Commodore y Tandy que simplemente no pudo sostener. Para enero de 1984 la compañía anunció que subiría el precio del Atari 800XL y Atari 600XL, 50 dólares —equivalente a 150 dólares actuales— por encima de la Commodore 64 y la Commodore VIC-20, respectivamente.
Al final de 1984, Atari vendió unos 700.000 ordenadores, versus los 2 millones de las Commodore. Durante el mismo año, Jack Tramiel, fundador de, casualmente, Commodore, renunció a su puesto de CEO y Warner le vendió Atari a cambio de 100 millones de dólares en acciones de la compañía.
Tras la adquisición, Tramiel desmontó el proyecto de los Atari XL y se enfocó en la siguiente generación de 16-bits, los Atari ST. Para conseguirlo, contrató a decenas de ingenieros de Commodore.