Triste noticia desde Hollywood. Kirstie Alley, mundialmente conocida por ser la protagonista de Mira quién habla y Cheers, falleció a los 71 años tras perder una dura batalla contra el cáncer.
"Nos entristece informarles que nuestra increíble, feroz y amorosa madre falleció después de una batalla contra el cáncer, descubierto recientemente. Estaba rodeada de su familia más cercana y luchó con mucha fuerza, dejándonos con la certeza de su interminable alegría de vivir y de las aventuras que le esperaban. Tan icónica como lo fue en la pantalla, fue una madre y una abuela aún más increíble", informó su familia a través de un comunicado compartido a través de la cuenta oficial de Kirstie Alley en Instagram.
Kirstie Alley pasó sus últimos instantes en Tampa, Florida, su lugar de residencia y donde también se trató clínicamente contra la terrible enfermedad. Aunque no fue posible salvar su vida, la familia se mostró agradecida con los médicos involucrados en su tratamiento: "Estamos agradecidos con el increíble equipo de médicos y enfermeras del Moffitt Cancer Center".
El emotivo mensaje concluye: "El entusiasmo y la pasión por la vida de nuestra madre, sus hijos, sus nietos y sus muchos animales, sin mencionar su eterna alegría de crear, no tenían igual y nos dejan inspirados para vivir la vida al máximo tal como ella lo hizo. Le agradecemos su amor y oraciones y le pedimos que respeten nuestra privacidad en este momento difícil."
Kirstie Alley puso rumbo a su carrera durante 1974, cuando abandonó la Universidad Estatal de Kansas para estudiar arte dramático. Tras un lustro dedicado al aprendizaje, dio el salto a Hollywood, donde rápidamente comenzó a atraer los reflectores en programas de concurso como Match Game y Password Plus.
Fue en 1982 cuando obtuvo su primer trabajo como actriz en Star Trek II: la ira de Khan, largometraje donde dio vida a Saavik. Su excelente trabajo le valió ser nominada a "Mejor actriz de reparto" en los premios Saturn. Posteriormente tuvo importantes roles en producciones como One More Chance, Champions, Cita a ciegas y Runaway.
Sin embargo, durante 1987 le surgió una oportunidad que catapultaría su éxito como nunca antes. Kirstie Alley reemplazó a Shelley Long en Cheers, considerada como una de las sitcom más emblemáticas de los 80s y 90s. Su interpretación como Rebecca Howe se hizo inolvidable y le permitió ganarse un lugar en el Olimpo de la televisión.
Tras finalizar su trabajo en Cheers durante 1993, se convirtió en la protagonista de David's Mother. Gracias a su trabajo en esta miniserie ganó un Emmy por "Mejor actriz". Pero a Kirstie Alley le quedaba un objetivo pendiente: conquistar la pantalla grande.
En 1989 protagonizó, junto a John Travolta, la comedia Mira quién habla, que fue un éxito en la taquilla. Su popularidad permitió que dos películas adicionales vieran la luz, Mira quién habla también y Mira quién habla ahora. Tras su participación en esta franquicia, Kirstie Alley apareció en 3 Chains o' Gold, El pueblo de los malditos, It Takes Two o Deconstructing Harry. Su último trabajo lo vimos en 2015 en la comedia romántica Un accidente llamado amor.
