La limpieza del hogar siempre ha sido un tema muy importante para muchas personas. Más aún a raíz de la crisis sanitaria del COVID-19 que ha propiciado dos nuevos escenarios: por uno, personas pasando más tiempo en casa teletrabajando. Por otro, los constantes consejos en torno a la limpieza del hogar para evitar problemas respiratorios.

Con este nuevo escenario, no es de extrañar que las aspiradoras se hayan convertido en uno de los productos más demandados. Pero no los tradicionales de trineo, que podemos ver en la mayoría de las casas. Nos referimos en concreto a otros dos tipos: los robots aspiradores y los aspiradores de mano. En Hipertextual hemos recibido las dos propuestas de Dreame para cada uno de ellos. Hoy te traemos nuestra experiencia con la Dreame Vacuum T30, una de las aspiradoras de mano más interesantes que podemos encontrar en el mercado por su relación calidad precio.

La principal ventaja de los aspiradores de mano es su facilidad de uso. Basta con apretar un gatillo y podremos recoger lo que queramos en cuestión de segundos, no importa el tamaño o la cantidad. Al no tener cable, facilita muchísimo el desplazamiento por la habitación.

Unboxing: difícil encontrar más por menos

Para empezar, el contenido de la caja ya sorprende por la cantidad de accesorios que incluye. Además del propio cuerpo del aspirador, vemos: una varilla principal de fibra de carbono, una manguera extensible, un adaptador para mejorar la flexibilidad, una boquilla adaptable para dos tipos de superficie, un cepillo para el polvo blando, un mini cepillo eléctrico, un multicepillo que será el principal que usaremos, un cabezal para llegar a sitios estrechos, un cargador y una base de carga que podremos atornillar a la pared. 

La aspiradora Dreame Vacuum T30 destaca en cuatro aspectos principales: su diseño, su capacidad para detectar el polvo, su rendimiento y su autonomía. Empecemos por el primero.

Diseño cómodo para llegar a cualquier sitio

El diseño de la nueva Dreame T30 está pensado para facilitar el aspirado en todo momento. No importa el uso que le demos o dónde tengamos que llegar, gracias a su ligereza y cabezales intercambiables, podremos aspirar cualquier cosa. Es especialmente cómoda por ejemplo para llegar a lugares como debajo de la cama o de un mueble ya que el tubo se puede poner en posición de casi 180º.

No es excesivamente pesado. En total, el peso neto es de 1,76 kilos por lo que no será cansado aspirar durante largas jornadas.

Por otro lado, Dreame ha pensado en la mejor forma de atrapar la suciedad a través del diseño de su cepillo. Para ello le ha dado una forma en V para que por ejemplo pueda desenredar los pelos de la alfombra, capturando la suciedad que hay entre ellos, o incluso el mismo cabello humano. Así podremos evitar el molesto momento de tener que andar limpiando el cabezal de cepillo de los pelos enredados.

Gran potencia de succión y detección de polvo

Quizá la principal novedad de esta Dreame T30 sea su capacidad para detectar el polvo en todo momento y así ajustar su potencia de succión. Para lograrlo, el cepillo inteligente es capaz de identificar el tamaño de las partículas de polvo en una habitación y lo muestra en la pantalla del propio aspirador. Así nosotros podremos ajustar el nivel de potencia para capturarlo. De esta manera ahorramos energía ya que no es necesario aspirar siempre al máximo nivel de potencia.

En la pantalla también podremos ver informes del rendimiento del aspirado, el nivel de carga o cualquier error que pueda surgir durante el aspirado. 

En cuanto al polvo, el nuevo aspirador de Dreame puede capturar hasta el 99,6% de las partículas de polvo, que son filtradas en su sistema de filtrado de cinco capas y enviadas al depósito. Cuando hayamos acabado, sólo deberemos abrirlo y vaciar toda la suciedad.

Y ahora vamos a ver su rendimiento y su capacidad de succión. La clave del nuevo Dreame Vacuum T30 es su motor, que puede girar hasta 150.000 revoluciones por minuto por lo que puede aspirar prácticamente todo, desde objetos microscópicos a otros más voluminosos.

A la hora de aspirar, tenemos para elegir tres tipos de intensidad, cada una de ellas repercute en la autonomía de la batería. En concreto, tenemos Light Dust (para polvo ligero), Medium Dust (para una cantidad de polvo normal) y Thick Dust, si por ejemplo necesitamos aspirar una zona tras haber realizado obras y hay una cantidad importante de polvo.

Autonomía: hasta 90 minutos de uso

El último aspecto, aunque no menos importante, es la autonomía. De hecho para muchas personas puede ser el valor diferencial, que le haga decantarse por un modelo u otro. El nuevo Dreame Vacuum T30 tiene una autonomía de hasta 90 minutos en una sóla carga, eso sí, usando el modo ECO. Si damos un uso normal, se reduce hasta los 35 y para momentos en los que necesitamos toda la potencia, se queda en 7,5 minutos. 

Cuando se quede sin batería, podemos cargarla usando su base o directamente extraer su batería y enchufarla a la corriente. En aproximadamente cuatro horas, tendrás el aspirador disponible de nuevo. 

En resumen, mantener un hogar limpio es importantísimo, pero no sólo de manera visible ya que lo normal es que se almacene una gran cantidad de polvo que no vemos, pero que está ahí y es perjudicial para la salud. Además, con las Navidades a la vuelta de la esquina, es un regalo muy interesante.