En algunas partes del mundo, los vehículos aéreos no tripulados (UAV, por sus siglas en inglés) ya se utilizan activamente para tareas de reparto. Ahora, una compañía británica ha presentado un drone que no solo promete transportar cargas pesadas, sino también ejecutar ataques con un torpedo.
Se trata de un proyecto de BAE Systems, en asociación con Malloy Aeronautics, que sido presentado en la exposición internacional de defensa DSEI 2021. El drone, denominado T-650, es totalmente eléctrico y con una sola carga de batería es capaz de volar hasta 30 km con una carga útil de 300 kg.
El drone, además, puede alcanzar una velocidad máxima de 140 km/h. Esta combinación de características lo convierte en una herramienta versátil para diferentes tipos de escenarios. BAE Systems asegura que está preparado para la "guerra antisubmarina" gracias al transporte de un torpedo Sting Ray.
Precisamente, este drone podría arrojar al mar el proyectil autopropulsado que al sumergirse solo tendría que desplazarse hasta alcanzar su objetivo. Desde la compañía señalan que el T-650 también puede ser utilizado para la actividad logística y el transporte potencial de armas y sensores para apoyar operaciones militares en tierra y mar.
Un drone que serviría para algo más que llevar torpedos
Pero esto no es todo. Los drones T-650 podrían servir para evacuar a víctimas en el campo de batalla. También se han contemplado otros usos, como el apoyo humanitario y logístico civil, aunque la BAE Systems señala que su objetivo es el militar, pero con un enfoque más respetuoso con el medio ambiente.
“Al no tener emisiones de carbono, estos drones podrían ayudar a revolucionar las operaciones militares donde existe el requisito de transportar cargas pesadas, ayudando a mantener al personal militar fuera de peligro en situaciones peligrosas y al mismo tiempo que se reduce el impacto ambiental de nuestras fuerzas armadas".
BAE Systems
De momento, el drone de BAE Systems y Malloy Aeronautics está en fase de prototipo y aún no se ha empezado a fabricar para fuerzas militares. Con la esperanza de que esto suceda, ambas empresas están trabajando juntas para explorar oportunidades para poner el nuevo vehículo conceptual en operaciones reales.
BAE Systems también tiene otros ambiciosos proyectos, como un drone que podría volar a 60.000 pies. Por dar contexto, los aviones comerciales vuelan a unos 35.000 pies. Se trata del PHASA-35, un vehículo eléctrico-solar que podría operar hasta por un año sin la necesidad de recargarse. Tal es así que busca ofrecer "una alternativa más asequible y persistente a las capacidades de satélites y aviones".