Alphabet, la empresa matriz de Google, podría enfrentarse a una de las mayores sanciones de su historia. Reuters informa que la Unión Europea planea iniciar una investigación a la compañía por posibles prácticas monopolísticas en relación a su su negocio de publicidad online.
Los reguladores antimonopolio de la Unión Europea comenzarán una investigación sobre el negocio de publicidad de Google a finales de año. En concreto, investigarán las prácticas monopolísticas frente a anunciantes, editores de medios, intermediarios y competidores, según la fuente.
Según datos de eMarketer, se espera que Google se quede con el 27,5% del gasto global en publicidad online a lo largo del año. Estas cifras quizá no parezcan alarmantes, pero los competidores aseguran que la compañía norteamericana tiene tanta influencia que, irremediablemente, dependen de ellos y dejen fuera a la competencia.
Google y su historial de sanciones por abuso de poder en la Unión Europea
No es la primera vez que Google se enfrenta a sanciones impuestas por la Unión Europea en relación a las prácticas monopolísticas de sus productos y servicios. En los últimos 10 años, la Unión Europea ha multado a Google con más de 8 mil millones de euros por practicas antimonopolio al bloquear a rivales en sectores como el comercio online, su sistema optativo Android y la publicidad en línea.
En la última semana, Francia ha multado a Google por su posición dominante en el mercado de la publicidad online. La Autoridad de la Competencia de Francia comprobó que la compañía realizaba prácticas que impedían a sitios webs y aplicaciones vender sus espacios publicitarios a otras empresas de publicidad. La multa, que asciende a 220 millones de euros, ha sido aceptada por Google. La multinacional confirmó que también modificaría algunas de sus métodos utilizadas para el negocio de publicidad.
Google no es la única gran tecnológica sobre la que se están poniendo los ojos últimamente. Empresas como Apple, Facebook o Amazon también están siendo examinadas por diversas razones en varias partes del mundo. En ese sentido, la Unión Europea está siendo una de las más exigentes.