"Estamos ilusionados con nuestro primer Ferrari totalmente eléctrico, que planeamos presentar en 2025". Con esas palabras, John Elkann, el presidente de la marca de automóviles más icónica del mundo, ha confirmado cuándo se producirá la entrada de Ferrari en el mundo de los coches eléctricos.
El ejecutivo lo ha anunciado durante la junta de accionistas que ha tenido lugar este jueves. Pero sus intenciones no quedan ahí. La marca también planea ser totalmente neutra en carbono, a través de acciones directas e indirectas, a lo largo de esta década.
Esta no es la primera vez que Ferrari coquetea con las unidades de potencia eléctricas. La marca del Cavallino Rampante anunció en 2013 el Ferrari LaFerrari, el primer vehículo de la casa italiana con un sistema híbrido. Este, concretamente, tiene un motor de gasolina de 800 CV que trabaja de la mano de un motor eléctrico de 120 kW (unos 163 CV).
En 2019, la marca italiana también anunció el Ferrari SF90 Stradale, su primer vehículo híbrido enchufable. Este cuenta con un motor V8 de 780 caballos de potencia que trabaja junto a tres motores eléctricos capaces de entregar 220 caballos de potencia.
¿Por qué el primer Ferrari eléctrico no llegará hasta 2025?
En 2020, Enrico Galliera (Ferrari) aseguró que la tecnología necesaria para un superdeportivo como el que aspira a construir Ferrari no estaría lista en los próximos cinco años. La marca, entre otras cosas, se estaría refiriendo a las baterías –uno de los más importantes en este tipo de vehículos–, los sistemas de carga, etc.
Ferrari, eso sí, no es la única marca de superdeportivos que está atravesando este proceso de transformación. Se espera que, en los próximos años, también se sumen a esta tendencia otras marcas como McLaren, Aston Martin o Lamborghini. Mientras tanto, empresas como Porsche ya se han adentrado en el mundo del vehículo eléctrico con coches como el Taycan.
El lanzamiento de un superdeportivo de Ferrari con un motor completamente eléctrico supondrá un antes y un después para la empresa italiana. Sobre todo teniendo en cuenta el ADN de la marca italiana, que ha hecho de sus motores de combustión una de sus principales señas de identidad.