El inicio de un año nuevo siempre da motivos para proponernos metas y tratar de adoptar nuevos hábitos. Aunque se trate de un cambio más bien simbólico, lo cierto es que nos da la excusa perfecta para ello. Netflix lo sabe bien y recordando su gran éxito en 2019 con ¡A ordenar con Marie Kondo!, este 2021 lo intenta con Minimalismo: Menos es más.
Minimalismo: Menos es más fue dirigido por Matt D'Avella. Se estrenó recientemente en Netflix y es una de las novedades para este mes de enero de 2021. Los ya conocidos "minimalistas", Josua Fields Millburn y Ryan Nicodemus, nos hablan de lo que el minimalismo ha hecho en su vida y lo mucho que puede hacer por nosotros si nos paramos a reflexionar en los objetos que tenemos y la forma en que los consumimos.
Minimalismo: Menos es más, un documental caótico
D'Avella realizó en 2015 otro documental de "los minimalistas". En dicha película, Josua Fields Millburn y Ryan Nicodemus también nos hablaron de su experiencia, pero igualmente se sigue una especie de road trip con ellos, mientras dan a conocer a lo largo de Estados Unidos la palabra del minimalismo. Minimalismo: Menos es más, el nuevo documental de Netflix, intenta replicar la fórmula, pero no lo consigue.
A pesar de que tiene una mayor producción, y han pasado ya cinco años de aquella experiencia de puerta en puerta para los minimalistas, Minimalismo: Menos es más, se tropieza con sus propios elementos. Casi resulta una paradoja que un documental sobre minimalismo se sienta desordenado. Pero así sucede con este contenido que, además de lo anterior, llega a rechinarnos con sus varios momentos llenos de cursilería.
El minimalismo no es para todos, ni todos somos para él
Josua Fields y Ryan Nicodemus son dos personajes fantásticos. Son carismáticos, encantadores y tienen una historia genial que contarnos. En el documental de 2015 lo logran con soltura y es muy divertido verlos día a día dando sus conferencias y viajando por todo el país con dos playeras en la maleta. En Minimalismo: Menos es más la narración salta de un lado a otro. Hay personas que por alguna razón dan su testimonio, aunque no sabemos muy bien a quién se lo dicen; si aprendieron de los minimalistas o lo hicieron por su cuenta.
También hay otros invitados que nos hablan sobre el consumismo y la terrible búsqueda de plenitud que se insiste encontrar en los objetos y en el acto de comprar. En otras ocasiones vemos las recreaciones de momentos clave de Josua y Ryan que los llevó a una vida en el mininalismo. Hechos que los hizo valorar su entorno, los objetos y alcanzar una cierta paz y armonía a su alrededor. Estas partes no siempre salen bien libradas y se sienten hasta superpuestas, innecesarias.
Eso sí, hacia el final de Minimalismo: Menos es más la cosa se pone mejor y se centra en lo que más nos interesa, el minimalismo en acción. Es aquí en donde nos dan algunos primeros pasos para ponernos en marcha a librarnos de objetos. También se explica con gran claridad que no es necesario convertirse a un minimalismo extremo y comprar todo con estilo minimalista, pues esta filosofía no es una moda, sino una forma alternativa de ver y vivir la vida en un mundo en donde todo está al alcance de un click.
Lo cierto es que Netflix consigue poner el ojo en un tema muy importante con su documental Minimalismo: Menos es más, aunque se tropieza en la forma. Si bien el director de esta cinta no es hábil en la forma de narrar, el mensaje es muy interesante. De cualquier manera, cada uno tenemos el veredicto final sobre este nuevo documental de la plataforma.
Minimalismo: Menos es más se encuentra disponible para todos los suscriptores de Netflix.