El Gobierno de Estados Unidos acusó a Boeing de mentir a la FAA sobre los dos accidentes del 737 MAX que cobraron la vida a cientos de personas. El Departamento de Justicia informó que llegó a un acuerdo con Boeing Company para resolver un cargo por conspiración para defraudar al Grupo de Evaluación de Aeronaves de la Administración Federal de Aviación (FAA).

"Los trágicos accidentes del vuelo 610 de Lion Air y el vuelo 302 de Ethiopian Airlines revelaron la conducta fraudulenta y engañosa de los empleados de uno de los principales fabricantes de aviones comerciales del mundo", reveló el fiscal general David P. Burns.

El Departamento de Justicia afirmó que los empleados de Boeing eligieron ganar dinero antes de decir la verdad a la FAA sobre la operación del 737 MAX. En ojos de los fiscales estadounidenses, la empresa omitió los datos referentes al MCAS que derivaron en los dos accidentes fatales en 2018 y 2019.

El MCAS es un sistema automatizado que detecta cuando el avión asciende en un ángulo mayor sin la suficiente velocidad y evita la entrada en pérdida. En ambos accidentes el sistema registró una lectura errónea del ángulo, enviado al avión en picado pese a los intentos de los pilotos por recuperar el control.

Boeing admitió en documentos oficiales que engañó a la Administración Federal de Aviación

Restos del Boeing 737-MAX 8 de Ethiopian Airlines

Según el Departamento de Justicia, Boeing admitió en documentos oficiales que engañó la FAA sobre este sistema. Tanto los documentos ofrecidos al Grupo de Evaluación de Aeronaves, como los manuales de vuelo y materiales de capacitación carecían de información del MCAS.

“Las declaraciones engañosas, las medias verdades y las omisiones comunicadas por los empleados de Boeing a la FAA impidieron la capacidad del gobierno para garantizar la seguridad del público que vuela. Este caso envía un mensaje claro: el Departamento de Justicia responsabilizará a fabricantes como Boeing por defraudar a los reguladores, especialmente en industrias donde hay tanto en juego."

Boeing recibió una multa de más de 2.500 millones de dólares, de los cuales 500 millones se destinarán para ayudar a las familias de los que murieron en los accidentes de Lion Air y Ethiopian. El fabricante pagará 1.770 millones a las aerolíneas que compraron los 737 MAX como compensación y 243,6 millones de dólares como sanción monetaria penal.

Pese a que el 737 MAX se alista para regresar a los cielos, la justicia estadounidense tendrá la mirada puesta en la compañía. Boeing deberá informar cualquier anomalía o evidencia de violación de las leyes de fraude de EE.UU., así como presentar informes anuales sobre el programa de cumplimiento.