Dicen que los perros se parecen a sus dueños. Esto puede llegar a ser cierto en algunos aspectos. Es verdad que, del mismo modo que tendemos a hacernos amigos de personas afines a nosotros, también solemos elegir así a las mascotas. Pero la cosa podría ir todavía más lejos. De hecho, según un estudio recién publicado en The British Medical Journal, podría ser que haya una relación entre la diabetes de los perros y sus dueños.
El trabajo, realizado por científicos de la Universidad de Uppsala, el Instituto Karolinska y la Universidad de Liverpool, busca también una posible vinculación con los gatos. Sin embargo, en ellos no parece haberla. ¿A qué se debe entonces? Esta es una pregunta que de momento no han podido responder, aunque ya tienen algunas teorías.
¿Cómo se relaciona la diabetes de los perros y sus dueños?
Para la realización de este estudio, sus autores tomaron datos procedentes de los seguros de atención veterinaria de Suecia y Reino Unido. En total había 208.980 parejas dueño-perro y 123.566 formadas por gato y humano, todas ellas registradas entre 2004 y 2006.
Por otro lado, se analizaron los registros sanitarios de los propietarios de mascotas entre 2007 y 2012. De este modo, pretendían discernir si había alguna vinculación entre el estado de salud de dueños y animales.
Anteriormente se han encontrado algunos puntos en común concernientes a factores como la obesidad, pero no en patologías concretas. Por eso, decidieron centrarse en la diabetes tipo 2. Necesitaban saber si existía una correlación entre la aparición de esta patología en las mascotas y su posterior diagnóstico en los dueños. Y así fue.
Observaron que sí había una relación entre la diabetes de los perros y sus dueños, pues tener un can con la enfermedad se asoció con 38% más de riesgo de que la padecieran sus amigos humanos. Además, el dato no cambiaba notablemente al ajustar otros factores de riesgo, como la edad o la raza de la mascota.
Por el contrario, con los gatos no se detectó ninguna asociación.
Una posible explicación
En un comunicado, los autores de esta investigación recuerdan que es un estudio observacional. Esto significa que buscan correlaciones entre varios conjuntos de datos, pero no aportan información que pueda explicarlas.
Sin embargo, tienen una teoría sobre la relación entre la diabetes de los perros y sus dueños. Por lo general, las personas más activas suelen dar largos paseos acompañados de sus canes. En cambio, las sedentarias tienden a sacarlos el tiempo justo. En cuanto a los gatos, suelen ser mucho más independientes y su ejercicio físico no depende tanto del de sus amigos humanos.
De cualquier modo, cabe destacar que el estudio cuenta con algunas limitaciones. Para empezar, se tuvo en cuenta el nivel económico como posible factor influyente sobre los resultados. Sin embargo, solo se incluyeron personas con un poder adquisitivo adecuado para pagarle un seguro veterinario a su mascota.
Por otro lado, no disponían de datos sobre la dieta o la actividad física de los perros y sus dueños.
Este podría haber sido un dato importante para buscar las causas. Pero la correlación es suficientemente grande como para prestarle atención de cara a futuras investigaciones. Así, según explican los autores del estudio, se podría considerar a los perros diabéticos como “centinelas” de los factores ambientales que podrían conducir a sus dueños a la diabetes.