The Walking Dead ha tenido un tránsito por la televisión tan duro y pesaroso como la existencia después de la muerte de sus zombies. Después de llegar a la televisión y convertirse en un fenómeno televisivo, la producción ha pasado por todo tipo de etapas que incluyen desde temporadas con ínfima sintonía, puntos muy altos en el argumento, otros definitivamente bajos, la pérdida de varios de sus personajes emblemáticos y una inercia incómoda que no tiene nada que envidiar a los monstruos favoritos de la audiencia.
Pero a pesar de todo, el recorrido final llevó The Walking Dead a una nueva reinvención que, como no podía ser de otra forma, es parte de todo un segundo aire argumental que sorprendió a la audiencia. La serie basada en la saga de cómics de Robert Kirkman intenta demostrar que puede ir más allá de la pérdida de sus personajes centrales, y ser algo más que un buen recuerdo en la memoria colectiva.
Pero mientras llegamos al que seguramente será un último capítulo que se discutirá por años, te dejamos diez curiosidades que te gustará saber de la que, sin duda, es una de tus series favoritas, aunque jamás lo admitirías en voz alta:
Una muerte, una cena
En una serie en la que todos los personajes están al borde de la muerte, el hecho que alguno sufra algún percance — como ser devorado vivo por un grupo de zombies — está entre las posibilidades, por lo que el equipo de producción tiene un protocolo para ¿celebrar? cuando uno de los actores regulares abandona el elenco.
“Les da a todos la oportunidad de tener una comida adecuada y decir: 'Te vamos a extrañar muchísimo'”, dijo Sarah Wayne Callies (quien interpretó a la esposa de Rick, Lori Grimes) a The Huffington Post en 2012.
Poco después, el programa se convirtió en un fenómeno de audiencia, por lo que las muertes pasaron a ser spoilers, de modo que las cenas se disimularon como “fiestas de cumpleaños” y así evitar que personal ajeno al set pudiera descubrir quién era la siguiente víctima.
Rick Grimes usó la misma ropa interior (y otras prendas) durante toda la serie
Bien, sí, este un dato un tanto desconcertante que además deja mucho que pensar — para bien — sobre el trabajo de los script en set y sobre todo, la línea de tiempo del argumento.
Para acentuar la sensación de verosimilitud de los personajes, el equipo de producción conservó la ropa original de cada primera aparición de todos los personajes, que sigue utilizándose en cada capítulo. Pero el caso de Rick Grimes es emblemático: el actor Andrew Lincoln conservó los jeans negros y la ropa interior color azul claro que lució en el piloto y siguió usándolos en cada temporada de la serie.
The Walking Dead: todos al colegio
Antes de perseguir incautos sobrevivientes para devorar, los extras que interpretar a los zombies en el programa asisten a un seminario de actuación en el que reciben un rápido curso de interpretación de los monstruos, y una prueba de maquillaje con el productor ejecutivo y leyenda de los efectos de terror Greg Nicotero, quien después elige a los actores más convincentes para integrarlos al programa.
Los créditos también han sufrido el inevitable paso del tiempo
En The Walking Dead todos mueren, antes o después, mientras que a su alrededor el mundo se desmorona con una rapidez inquietante.
Lo mismo ha ocurrido con los créditos de inicio, que comienzan a presentar señales evidentes de deterioro y se desmoronan fragmento a fragmento durante ocho temporadas.
Un detalle visual de considerable importancia, para comprender la forma en cómo el programa funciona como algo más que una colección de historias sobre muerte y destrucción.
Los pequeños grandes detalles
¿Te has preguntado alguna vez cómo la serie logra el convincente efecto de que los zombies no respiran? Pues de la manera más sencilla posible: con CGI se encargan de ser biológicamente precisos y evitar que alguna vez, cosas como el delator movimiento del pecho de alguna criatura, pueda afectar la credibilidad de la serie como conjunto.
Se trata de mínimos detalles pero que, en general, permiten comprender hasta qué punto una serie de ciencia ficción depende de crear la atmósfera precisa.
Un fan mordió a Norman Reedus
No es un chiste: un fan mordió al actor en el pecho durante una de las presentaciones en el Walker Stalker Con de Nueva Jersey.
El actor se lo tomó con calma y no presentó cargos, pero demostró que todavía hay un apreciable ¿interés? alrededor de la serie y su universo. Tanto para este tipo de demostraciones de ¿afecto?
Hay algunos homenajes a Breaking Bad en The Walking Dead
La serie de AMC ha rendido pequeños homenajes a uno de los grandes éxitos de la televisión de los últimos años: Merle (Michael Rooker) tiene metanfetamina azul en la primera temporada.
Otro que seguramente habrás reconocido si eres fan de la serie: Glenn (Steven Yeun) también conduce el mismo Dodge Challenger con rayas de carreras que Walter White le compró a su hijo.
En la serie no se ha utilizado la palabra zombie ni una sola vez
Y es una regla estricta que se cumple después de varias revisiones del guion. A los no muertos se les ha llamado de muchas maneras: caminantes, devoradores de pieles, cabezas muertas, desperdiciados, podridos y docenas de otros apelativos, pero jamás la palabra con que el monstruo es conocido en la cultura pop.
¿El motivo? Puramente semántico: se supone que el mundo en desgracia no sabe con exactitud qué ocurre y nunca hubo un consenso sobre qué tipo de monstruos eran los que atacaban a la población. Y para cuando los habitantes del mundo de la serie lo supieron ya nadie estaba interesado en nombrarlos de manera directa.
Los muertos comen jamón
¿Los zombies se ven muy felices mientras mastican pedazos de vísceras? Hay una razón: entre el plástico y la silicona de los modelos de órganos, hay jamón y de buena calidad. Pero el problema no está en la forma en cómo se mastica el trozo de comida, sino en transmitir la voracidad de un zombie.
El actor Vincent Martella dijo que era un desafío comerse a una persona en el programa, no por el jamón, sino por la inconsciencia. “Cuando te comes a alguien tienes que parecer un animal devorando presas”, le dijo a Today. “No puede parecer que tiene un motivo específico o dónde va a tomar un bocado”.
Una vieja amiga del principio de The Walking Dead
La niña zombie que sostenía un oso en el episodio piloto, y a la que Rick Grimes le disparó aterrorizando a toda la audiencia, volvió en la temporada número ocho en un pequeño cameo emblemático.
Para su episodio número 100, la serie trajo de regreso a la actriz Addy Miller para interpretar a un zombi muy similar al icónico que interpretó cuando tenía 10 años.
