Los mosquitos de la familia Aedes nos invaden. Primero fue, en 2004, el mosquito tigre (Aedes abopictus) empezó a extenderse desde Barcelona. En 2018, el Aedes japonicus comenzó su invasión de Asturias y Cantabria. Sin embargo, no se sabe exactamente si ha seguido tomando territorio español.

De hecho, este verano, según informa El País, se va a realizar una investigación de campo para conocer cómo de extendido está el Aedes japonicus. A diferencia del mosquito tigre que se extiende por el Mediterráneo, este prefiere las zonas fuera de las ciudades, es decir, el pastos con ganado. De hecho, es bastante probable que ya se encuentre en Galicia.

Este mosquito "es nativo de Corea, Japón, Taiwán, el sur de China y Rusia", indican desde el Ministerio de Sanidad. Y su expansión puede ser mayor que el mosquito tigre porque sus exigencias, a la hora de criar, son menores. "Aedes japonicus puede criar en una amplia gama de hábitats acuáticos, tanto naturales como artificiales, incluidos charcos en rocas, neumáticos, envases de leche, cubos, etc", añaden. Por otra parte, mientras el mosquito tigre prefiere zonas más urbanas e, incluso, cálidas, no sucede lo mismo con este nuevo mosquito: "hábitats con una temperatura del agua superior a 30˚C no son aptos".

Hallazgo de Aedes japonicus

"El hallazgo se realizó gracias a una observación de esta especie, acompañada de fotografías, enviada por una persona anónima y evaluada por entomólogos de Mosquito Alert", apunta el ministerio de Sanidad. Mosquito Alert, explican, es "una plataforma de ciencia ciudadana coordinada por diferentes centros de investigación públicos, que tiene por objetivo aunar esfuerzos entre la ciudadanía, científicos y gestores de salud pública y medio ambiente para luchar contra mosquitos vectores de enfermedades como Zika, Dengue y Chikungunya".

Es más, al igual que otros mosquitos, este Aedus puede transmitir enfermedades infecciosas. Sin embargo, desde el Ministerio de Sanidad apuntaban en 2018 que "el riesgo de transmisión autóctona de enfermedades asociadas a este vector se considera en este momento muy bajo para España". "Pero debe ser reevaluado a medida que avance la investigación entomológica puesta en marcha", añadían.

De hecho, este mosquito es vector del virus del Nilo Occidental, apuntan desde Sanidad. Este virus afecta principalmente al sistema nervioso de caballos y aves. Además, es una enfermedad que ya existen en España porque la transmiten mosquitos autóctonos. En el caso de las personas, los humanos pueden infectarse. "Aproximadamente un 20% de las personas infectadas por este agente patógeno presentan la fiebre del Nilo Occidental, que se caracteriza por fiebre, dolores de cabeza, cansancio, dolores corporales, náuseas, vómitos y, a veces, erupción cutánea (del tronco) y agrandamiento de ganglios linfáticos", indican desde la Organización Mundial de la Salud.

A pesar de ser posible vector de enfermedades, por el momento no hay que preocuparse. Lo que sí es importante es saber cuánto espacio ha invadido este nuevo mosquito en España. Ya no se puede erradicar, pero tenemos que saber cómo se ha extendido por el país.