Google se enfrenta a un litigio multimillonario tras ser acusado de rastrear a sus usuarios cuando estos usan el modo de navegación privada o de incógnito en sus navegadores. Presentada en una corte de California, el demandante acusa a Google de invadir la privacidad de millones de usuarios mediante un seguimiento generalizado de en modo "privado", según Reuters.

¿Cuál es la historia del tercer fundador de Google?

En la demanda presentada en la corte de San José, contra Alphabet Inc. se apunta a un tracking indiscriminado en el modo incógnito a través de Google Analytics, Google Ad Manager y el resto de trackers que implementan muchos sitios web y que son propiedad de Google.

Google: de nuevo en el punto de mira

La demanda no solo se basa en el escritorio, puesto que apunta a que este comportamiento se repite también en las apps para smartphones que usan la tecnología de Google, rastreando a los usuarios independientemente de si estos hacen click o no en los anuncios de Google.

Google ya ha refutado estas acusaciones, y en declaraciones a Reuters, José Castaneda, portavoz de la compañía, apunta a que son los sitios webs, en todo caso, los que pueden recopilar esta información:

"Como declaramos claramente cada vez que abre una nueva pestaña de incógnito, los sitios web pueden recopilar información sobre su actividad de navegación"

En este sentido, si bien es cierto que Google advierte en sus navegadores que las webs que visitemos pueden recopilar información, independientemente de que el navegador no lo haga, la creencia popular es que al usar estos modos privados, se evita el rastreo, algo que es totalmente falso, y que casos como los de Facebook han demostrando en el pasado, que rastrean incluso aunque no tengamos perfil o no visitemos su propio sitio web.

Aquí la cuestión que se presenta ante la corte no es solo que Google pueda o no recopilar información en los modos privados, también que puedan mejorar los perfiles de los usuarios al rastrearlos a través diferentes modos de navegación, combinando datos de la navegación privada y normal.

La acusación pide 5000 millones de dólares a Google, pero a punta a que dada la dimensión de los usuarios que podrían estar afectados, fija la cuantía en 5,000 dólares por cada usuario. De momento eso sí, habrá que esperar a que se pronuncie la corte.