Shay Victorio, ha sido condenada a 116 años de cárcel por la justicia brasileña. Empezó hace 12 años como jugadora de eSports en 2008 y se popularizó con Counter-Strike: Global Offensive. En 2019 decidió retirarse y a partir de ahí se ha dedicado a ser streamer e influencer en el sector.
Victorio es una pionera de la escena brasileña, no solo en el mundo de los esports sino en el papel de la mujer en los videojuegos en el país. Pero una sentencia en su contra la pondría en la cárcel durante 116 años —tendría que cumplir 30, obligatoriamente— por supuestamente estafar a 118 clientes de una tienda online que mantuvo entre 2013 y 2017. Estas personas enviaron quejas formales al gobierno de Sao Paulo al no recibir los bienes que adquirieron.
La jugadora e influencer aún no ha sido arrestada porque las leyes brasileñas permiten que mantenga su libertad —bajo custodia policial— hasta que el proceso de apelación de la sentencia termine.
En caso que la apelación sea negada, tendría que, obligatoriamente, entrar a la cárcel. Victorio, por su parte, ha explicado en su cuenta de Instagram que es inocente y acusa a su ex-pareja de los casos de fraude.
Su abogado también ha enviado un comunicado a UOL, un portal muy popular en Brasil donde recuerda que la tienda de Shayene Victorio, mientras estuvo operativa efectuó más de 10.000 transacciones exitosas de productos y reitera que se trata de una campaña de difamación de la cual su cliente es víctima.