Siguiendo con el repiqueteo constante al que Samsung está sometiendo a la gama media en los tiempos recientes, la firma surcoreana añade una muesca más a su catálogo de este 2020 con el Galaxy A71, un terminal que se centra de manera prioritaria en el grupo de usuarios que, dentro de la gama media, buscan algo más allá de lo meramente esencial. Con ese objetivo, y el de diferenciarse del resto de propuestas de la marca, llega un terminal que expresa como ninguno el espíritu actual de la firma para dicho segmento.Hablábamos recientemente del Galaxy A51 como una de las propuestas de Samsung para el apartado contenido del mercado, y el Galaxy A71 no es sino su hermano mayor, como ya ocurriera el año pasado con los modelos A50 y A70. En este contexto, dos son los hechos que pueden ser anticipados y que se cumplen con la nueva generación de smartphones: ambos comparten varios aspectos, pero también disponen de varios puntos en los que se diferencian lo suficiente como para que merezca más la pena apostar por uno u otro, según el perfil de cada usuario.
Presentan una gran cantidad de similitudes porque así lo demanda la actual estrategia de de cohesión dentro de la firma, donde todos –o casi todos– los terminales manufacturados por la marca cuentan con una serie de aspectos comunes que los hace reconocibles ante el gran público. En un momento en el que cada vez son más los smartphones provenientes de toda suerte de marcas y fabricantes, aquellos que cuentan con el logo de Samsung impreso siguen pudiendo ser diferenciados del resto de manera más o menos clara por su estética.
https://hipertextual.com/analisis/samsung-galaxy-a51
Era una de las intenciones de la marca cuando anunció que daría más peso a su gama media y que llevaría, incluso, antes características a este segmento del mercado que a sus teléfonos buques insignia. Una apariencia y sensación cohesionadas a lo largo y ancho e su porfolio para dar lugar a una mejor experiencia, que en el caso del Galaxy A71 se muestra más claro que nunca.
Galaxy A71: más de todo
Del Samsung Galaxy A71 hay que destacar que, de lo que antes se dará uno cuenta, es que se diferencia con su hermano pequeño en un hecho notoriamente palpable: el tamaño. Si ya los terminales de la empresa acostumbrar a no ser demasiado comedidos en dimensiones, en este caso no iba a ser menos.
Su parte frontal aloja un panel AMOLED de 6,7 pulgadas sin más interrupción que el agujero en su parte superior, horadado para permitir el alojamiento en su interior de la cámara destinada a los selfies. Una pantalla bien calibrada, con una pequeña "barbilla" en su zona inferior, que se hace perfecta para el consumo de vídeos o cualquier tipo de contenido multimedia, tanto por dimensiones como por calidad.
Y si bien es cierto que no se trata este de un smartphone pequeño, no lo es menos que tanto los acabados como su peso total hacen que no sea incómodo de sujetar e incluso de utilizar con una sola mano. Sin ser, naturalmente, el más compacto del mercado, la sensación general que consigue ofertar es ciertamente buena en términos generales.
A esto ayuda que el marco (donde podemos encontrar un conector jack de 3,5 milímetros y un puerto USB de tipo C en su parte inferior) sea de plástico, así como su trasera. En esta última, un solo elemento destaca: su módulo de cámara cuádruple, muy similar al del A51 pero cuyo sensor principal aumenta hasta los 64 megapíxeles.
Cámara capaz
El apartado fotográfico continúa siendo, como ya lo ha sido en los tiempos recientes, uno de los pilares fundamentales a la hora de focalizar la atención en la construcción –y posterior comercialización– de los smartphones. Se ejemplifica en el Galaxy A71 con sus cuatro lentes traseras, que permiten tomar imágenes en gran angular, con un modo macro o con mejor profundidad gracias a un sensor dedicado a ello en exclusiva. No se encuentra presente, eso sí, un telefoto que aporte zoom óptico con el fin de realizar capturas ampliadas sin perder detalle por el camino.
La configuración fotográfica del Galaxy A71 es la siguiente:
Frontal:
- 32 MP f/2.2
Trasera:
- Principal: 64 MP f/1.8
- Gran angular: 12 MP f/2.2
- Macro: 5 MP f/2.4
- Profundidad: 5 MP f/2.2
En líneas generales, ocurre lo mismo que lo ya visto en su hermano pequeño. El desempeño general es bueno y las opciones con las que jugar para obtener fotografías son múltiples, en un ejercicio de dar al usuario cuantas herramientas necesite para obtener la mejor de las tomas en un momento dado. Así y todo, el tratamiento y el procesado de Samsung hacen que los colores obtenidos, especialmente en personas o zonas cálidas sean en cierta medida diferentes a lo que uno ve en la realidad. Enseña de la casa a la que uno se encuentra sobradamente acostumbrado ya, pero que no deja de ser relevante, especialmente si uno viene de un smartphone de otro fabricante.
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A pesar de lo anterior, es una cámara que no defrauda y que, para el rango medio del mercado, consigue dar un buen balance entre calidad y opciones de disparo. En situaciones de baja luminosidad es donde sí sufre un poco más, especialmente en el gran angular, pero un uso mesurado de este –y junto con el modo noche– deberían resolver la papeleta en buena parte de los casos.
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Un smartphone para todo el día
Si hablamos de experiencia de uso con el Galaxy A71 es necesario destacar uno de los aspectos que, por algún motivo, no se encontraban presentes en el Galaxy A51 en el momento en el que lo pudimos probar en Hipertextual. Se trata de aquel error en la fluidez del dispositivo, por el cual las animaciones y transiciones entre aplicaciones ofrecían una respuesta que en ocasiones no era la óptima.
En este modelo, las mejoras internas, en clave de Snapdragon 730 (aunque no sea el más reciente Snapdragon 765) y 6 u 8 GB de RAM –según el modelo–, hacen acto de presencia, traduciéndose en una mayor fluidez y velocidad. A tener un día a día casi perfecto con el dispositivo contribuye en gran medida su batería de 4.500 mAh, que será más que suficiente para alcanzar el final del día sin tener que pasar por el cargador incluso si la jornada ha sido exigente. A mayor tamaño del dispositivo; mayor batería –o así debiera ser–, y Samsung ha sabido aprovechar de manera notable esta cualidad en el Galaxy A71, que posibilita, además, la carga rápida a 25W.
A pesar de todo lo mencionado, y de que lo obtenido supera en calidad al Galaxy A51 en medida suficiente como para recomendar su compra, al Galaxy A71 es todavía posible echarle de menos algunas mejoras. La principal de ellas, una mayor rapidez en el lector de huellas dactilares. Se ha convertido en una plegaria recurrente, pero es fundamental que el desbloqueo del dispositivo, si se apuesta por un método como el de incluir el sensor bajo la pantalla, no empeore la experiencia que se estaba consiguiendo hasta el momento. Nuevamente, en este caso es así, siendo algo más lento y errático que el de terminales de su competencia más directa.
Por pedir, habría sido agradable encontrar también una cierta calificación de resistencia ante el polvo y el agua, por lo que pueda pasar en el uso diario del terminal; así como un altavoz estéreo. El motivo sigue siendo el de siempre: en un smartphone muy enfocado al consumo multimedia y con una pantalla que se presta a ello, conseguir un resultado más potente en el apartado del sonido nunca está de más.
Conclusión
En líneas generales, el Galaxy A71 es un buen dispositivo que reafirma que Samsung va por el buen camino con la gama Galaxy A. Con un diseño cuidado, unas características que lo hacen competente en el mercado actual y, lo más importante de todo, una experiencia de uso diaria que deja buenas sensaciones, aquel que lo compre no quedará decepcionado ante lo que ofrece el terminal.
De entrada, es posible que el precio inicial del mismo pueda suponer un obstáculo a la hora de medirse ante smartphones rivales, pero as fluctuaciones del mismo pronto harán que no suponga demasiado problema.
Pros
- Autonomía sin carencias
- Cómodo a pesar de su tamaño
- Gran versatilidad fotográfica
- Procesador y RAM ofrecen un gran resultado conjunto
Contras
- Sin altavoz estéreo
- Lector de huellas lento
- Sin resistencia IP al agua/polvo