Colocar éxitos en taquilla ya no es tan fácil como antes. Al menos para las compañías que no son Disney. Y es que ahora, con un aumento de la producción de cine en todo el mundo, y en términos generales, el aumento de otras opciones de ocio hacen que cada vez sea más complicado luchar por el tiempo del espectador y que la inversión millonaria se traduzca en beneficio palpables en las salas de cine.
Disney conquista la taquilla mundial: ¿llegó el temido monopolio?
Y es que en un momento en el que incluso sagas multimillonarias se quedan a medio camino, ¿cómo van a hacer las productoras para elegir qué contenidos ponen en marcha para garantizarse, al menos sobre el papel, que sus producciones funcionan? Utilizando inteligencia artificial. O al menos ese es el plan.
Warner Bros. ha anunciado que empezará a usar esta tecnología para la toma de decisiones, de forma que será una inteligencia artificial la que analice, por un lado, los gustos del público potencial y, por otro, los propios proyectos para ver si tendrían tasa de éxito.
No se trata de un desarrollo propio, puesto que la compañía usará el sistema de gestión de proyectos de IA de Cinelytic para ayudar a tomar decisiones sobre películas, y solo durante el "proceso de luz verde":
Cinelytic combina inteligencia artificial y tecnologías basadas en la nube para permitir que los profesionales de la industria del entretenimiento tomen decisiones más rápidas y mejor informadas en toda la cadena de valor del contenido, al proporcionar datos integrales, análisis predictivos y herramientas de gestión de proyectos en una plataforma en línea integrada.
Es decir, siempre será un humano el que tenga la última palabra para confirmar si sale adelante un proyecto o no, puesto que de momento los datos solo se usarán para mejorar la toma de decisiones: determinar si una película se trata como un éxito de taquilla de verano o material de relleno a principios de año.