La comedia creada por Laurie Nunn regresó con su segunda temporada tras una exitosa primera entrega en 2019. Sex Education nos cautivó con su combinación de humor ligero y una profundidad sorprendente, y en su segunda temporada no solo repite la fórmula sino que mejora ampliamente sus alcances, desarrolla a sus personajes y propone varias hilos interesantísimos.
Si al principio esta serie británica se enfocó en la historia de Otis Milburn (Asa Butterfield) y su peculiar asesoría sexual que daba a sus compañeros de escuela, en esta segunda temporada aquel asunto queda atrás casi en su totalidad pero se presentan otras historias, todas con una gran carga emotiva, con gran dosis de humor, pero también de temas con los que cualquiera se sentirá identificado. Por supuesto las intimidades de cada personaje son clave para comprender la riqueza de esta serie creada por Laurie Nunn.
‘Sex Education’, una comedia adolescente única (e imperdible) de Netflix
Recordemos que hacia el final de la primera temporada Otis comienza a salir con Ola (Patricia Allison), luego de resignarse de que Meave (Emma Mackey) era inalcanzable —o al menos eso creyó él—. Esta nueva etapa en la vida de Otis, así como la incursión de Ola en la misma escuela que él, pone en la mesa nuevas situaciones, amistades y enemistades. Por su parte Meave regresa al colegio pese a la negativa del director Michael Groff (Alistair Petrie), y pronto se instala un triángulo entre Otis, Ola y Meave con muchas más aristas de las que se esperaría de cualquier triángulo amoroso adolescente.
Uno de los grandes aciertos de la segunda temporada de Sex Education es la introducción de nuevos personajes, que no solo son interesantes, sino que hacen brillar a los que ya conocemos. Cada uno de ellos sin excepción ponen de manifiesto que estamos ante una serie inteligente y muy profunda, que no solo se apega a la comedia y los atrayentes temas sexuales sino que aborda temas universales, que más que un drama adolescente demuestra ser un drama con adolescentes que cautivará por muchas razones a toda clase de público. Será muy difícil no identificarse con los personajes, no sufrir con ellos, no reconocernos en los temas más ocultos, más íntimos y por tanto más mitificados; Sex Education les pone luz sin preocupaciones y rodeos. Sin duda el guion es maravilloso y se nota que han trabajado por sacar provecho del camino ya andado en la primera entrega.
El corazón de Meave
Antes del estreno de Sex Education, y un tanto en la primera entrega, podíamos decir que la historia iba principalmente Otis, hijo de una peculiar terapeuta sexual —la doctora Jean Milburn (Gillian Anderson)—, que pese a ser virgen y ser bastante torpe en materia de relaciones personales, decidió asesorar a sus compañeros con una improvisada clínica de apoyo en temas sexuales. Sin embargo, tras su segunda temporada, Sex Education difícilmente se puede resumir de esa manera, pues cada personaje se desarrolla con amplitud, con dramas y problemas propias de esta terrible etapa de la vida, y los que ya no son adolescentes, pues, simplemente se enfrentan a las vicisitudes de la vida.
Meave, por ejemplo, se empeña en regresar a la escuela con el objetivo muy claro de no convertirse en su mamá y su hermano. Esto precisamente cuando Erin Wiley (Anne-Marie Duff), su madre ausente, reaparece. Así, entre su compleja vida familiar y la escuela, tiene que salir adelante sorteando todo tipo de pruebas. Su corazón ha sido expuesto a demasiadas cosas y por eso se oculta en la apariencia de "chica mala", sin embargo, en esta segunda entrega la conocemos mucho más, sufrimos en silencio como ella hace por todo lo que le pasa, y también nos recordamos una y otra vez que solo es una jovencita que ha vivido con muy poco afecto en su camino pero que tiene un corazón de oro.
Ser uno mismo
En la adolescencia se definen muchas cosas en la vida de las personas, y poco a poco van siendo ellas mismas, es decir a tomar sus propias decisiones, como apegarse o apartarse de las tradiciones familiares. La orientación sexual es un punto muy importante en esta etapa, por supuesto, y Sex Education saca provecho de esto al máximo; nos presenta situaciones de toda clase, con personajes de todas las edades, pues la sexualidad es un aspecto inherente a las personas, a su desarrollo y desenvolvimiento durante toda la vida.
La exploración de la sexualidad con una mirada natural pero muy profunda es un acierto en todo sentido. Los creadores de la serie realmente hablan sin tapujos pero sin aspavientos, retoma los casos, los personajes, los amplísimos espectros de la sexualidad y la orientación sexual y los explora sin culpas. Será difícil elegir a un personaje favorito, todos tienen un encanto propio, y todos tienen tantos miedos y pocas herramientas que nos recordará nuestra propia fragilidad, pero también nuestra propia valentía.
Mi primer acoso
Otro de los puntos más destacados de la segunda temporada de Sex Education es cuando una chica sufre acoso sexual en un autobús, este punto da pie a una serie procesos y exposición del tema de acoso que sufren las mujeres a diario, con un tratamiento inteligente y muy conmovedor. No se trata de una anécdota, ni de un asunto incluido en la historia por "moda", sino de un problema real y preocupante con el que abordan no solo el acoso en sí, sino temas tan complejos como la recuperación de la confianza, la sororidad, la compasión y muchos más.
Sin duda estamos ante una serie que más allá de sus personajes adolescentes propone temas de toda índole con una gran inteligencia y con un toque conmovedor y divertido. Los personajes crecen ante nosotros, se transforman, se quiebran y los llegamos a conocer mucho más que entre ellos mismos, eso nos hace parte importante de la trama y nos mantiene enganchados durante los 8 episodios de la segunda temporada. Sex Education ha regresado con mucho más qué ofrecer y deja la puerta abierta para continuar con su entrañable historia. Cada capítulo nos parecerá mejor que el anterior y, además, los disfrutaremos en grande por su formato, por la dirección y por su excelente música. Sin duda es una serie imprescindible de Netflix.
Ambas temporadas de Sex Education se encuentran disponibles para todos los suscriptores de Netflix.