Chats y correos electrónicos internos de empleados de Boeing filtrados y publicados por el New York Times muestran conversaciones terroríficas relacionados al 737 MAX. "Todavía no he sido perdonado por Dios por el encubrimiento de información que hice el año pasado", dice uno de los mensajes refiriéndose, aparentemente, a una interacción que la persona tuvo con la Administración Federal de Aviación (FAA).

Los textos vienen de documentos enviados por Boeing al Congreso de Estados Unidos. Se han publicados todos en tres diferentes grupos de mensajes publicados en Scribd. En una de las interacciones un empleado pregunta: "¿Pondrías a tu familia en un avión pilotado por una persona entrenada en el simulador del Max? Yo no lo haría", la respuesta de la otra persona en la conversación: un simple "No".

Las conversaciones muestran cómo Boeing intentó reducir la cantidad de horas en el simulador que la FAA requiere para la certificación de pilotos para el 737 MAX. Aparentemente fue lo que hizo que los aeronautas no estuviesen preparados para reaccionar ante los fallos de software que hicieron que dos de estos aviones se desplomaran, matando a 346 personas.

Los chats y correos electrónicos también muestran la agresividad con la que Boeing intentó convencer a sus empleados y a sus clientes de la gran idea y producto que el 737 MAX era. El argumento de venta más fuerte de la aeronave es que requería mínimo tiempo de entrenamiento para la certificación de los pilotos que venían del 737 NG.

Considerando que el tiempo de simulación y aprendizaje es sumamente caro, el adquirir nuevas aeronaves sin el elevado costo que significa el entrenamiento de pilotos era una idea extremadamente atractiva para las aerolíneas.

"Quiero hacer hincapié en la importancia de mantenerse firme en el argumento que no se necesita ningún tipo de entrenamiento en simuladores para la transición del NG al MAX" dice uno de los emails enviado en 2017 por el asesor técnico principal del programa del 737. "Nos enfrentaremos a cualquier regulador que trate de convertirlo en un requerimiento".

En otro intercambio de correos, el mismo asesor técnico principal insiste a uno de sus clientes —una aerolínea no revelada— la insistencia de no requerir entrenamiento: "No hay razón alguna para que tus pilotos necesiten tiempo de simulador para poder operar el MAX. Boeing no entiende qué obtendrán con una sesión de tres horas".

Cuando la aerolínea finalmente fue convencida que no hacía falta tiempo en simuladores para los pilotos que se pondrían al mando del 737 MAX el mismo asesor técnico principal envió otro email: "¡Parece que mis trucos Jedi han funcionado de nuevo!"

Hace dos días Boeing ha aceptado y anunciado que recomienda entrenamiento en simuladores para pilotar el 737 MAX, en caso que el avión vuelva a volar. Por el momento la FAA no lo ha certificado para operar nuevamente.

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