Hasta 100 imágenes de una sola vez, desde cualquier navegador moderno, de escritorio o móvil, y sin pasar por caja, completamente gratis. Así es Imgbot, una sencilla página web, sencilla en aspecto, pero que permite realizar tareas de edición y retoque fotográfico que antes solo podíamos hacer con un programa o aplicación específicos.

Imagina que tienes decenas de fotografías y necesitas aplicar a todas ellas una marca de agua para que se vea claro que son de tu propiedad. O tienes que comprimir unas imágenes que ocupan mucho espacio. O cambiar su resolución para que no se vean demasiado grandes en tu página web, en tu blog personal o en tu perfil de Facebook o Instagram.

Hay tareas que puedes hacer manualmente porque solo afecta a una o dos imágenes. Esto no nos lleva más que unos pocos minutos y es fácil de hacer desde tu PC, Mac o desde tu smartphone o tablet. Pero no es lo mismo si hablamos de decenas de fotos que sacaste en un viaje o en tus vacaciones. Comprimir o redimensionar fotos una a una hasta un total de 100 nos llevará mucho tiempo y, para qué negarlo, es aburrido y pesado.

Editar fotos por lotes

El objetivo de Imgbot es resolver cuatro tareas frecuentes que nos encontramos al procesar fotografías o imágenes digitales: cambiar su resolución, recortar los bordes, comprimirlas o cambiar su formato y, finalmente, aplicar una marca de agua. Como hemos comentado antes, Imgbot admite hasta 100 imágenes de una vez y de un tamaño de 25 MB cada foto. Por lo demás, es compatible con los formatos JPG, PNG y GIF.

Al procesar varias imágenes al mismo tiempo, Imgbot nos ofrecerá un archivo ZIP que incluye todo ese material ya procesado para que descarguemos a nuestro dispositivo.

Veamos cómo funciona cada una de las tareas que puede desempeñar Imgbot. Para redimensionar imágenes, podemos elegir una escala o porcentaje aproximado o cambiar uno de los dos valores de referencia, altura o anchura. El cambio de resolución se hará proporcionalmente a uno de los valores que cambiemos.

Para recortar los bordes, contamos con una rejilla de referencia que podemos ampliar o reducir y mover por encima de la imagen. También es posible invertir la imagen de derecha a izquierda o de arriba abajo. Finalmente, podemos guardar el resultado en PNG o JPG. Por desgracia, no permite crear una rejilla de referencia de un tamaño concreto a partir de una regla o de medidas concretas, tenemos que hacerlo a ojo.

Otra función interesante de Imgbot es la posibilidad de comprimir imágenes de gran tamaño y cambiar su formato en el proceso, ideal para subir fotografías a nuestro sitio web y que carguen más rápido. El proceso es automático, de manera que cuando termina, te dice el tamaño inicial (2,63 MB en el ejemplo), el tamaño final (616 KB) y el porcentaje de compresión logrado (77%).

El cuarto pilar de esta herramienta son las marcas de agua. Podemos añadir un texto o una imagen a modo de logotipo personal. Con la marca de agua nos aseguraremos de que nuestras imágenes no son usadas por terceros sin nuestro permiso, y si alguien comparte esa imagen, todo el mundo sabrá que nosotros somos sus autores originales.