Las llamas asolan Gran Canaria por segunda vez en lo que va de mes. Ya se perdieron 1.500 hectáreas hace unos días y, ahora, el fuego acorrala el Parque Natural Tamadaba, que también es Reserva de la Biosfera debido a que parte de la fauna y flora habita únicamente en esta zona. En estos momentos el incendio parece controlado después de cuatro días en los que se han quemado 10.000 hectáreas de la isla, al menos 2.000 hectáreas son de pino canario.
El Tamadaba ocupa 7.538 hectáreas entre los municipios de Agaete, Artenara y San Nicolás y desde 1987 es Parque Natural. Además, está cubierto casi en su totalidad por pinos canarios, que son altos, simétricos, de color verde ceniza y resistentes al fuego por naturaleza. En una primera valoración se cree que ha podido afectar a más de 150 especies vegetales endémicas de la zona. Sin embargo, el hecho de que los pinos canarios sean ignífugos da esperanzas de que, al menos, esta especie no haya sufrido tanto los efectos de las llamas. Las autoridades se están centrando en terminar de extinguir el fuego y, cuando este termine, ya se verán los daños en la flora del Tamadaba, aunque se espera que la destrucción del lugar sea menor que podemos imaginar después de ver las fotografías que llegan desde la isla.
El fuego ha sido rápido dentro del pulmón de Gran Canaria, por lo que la peor parte se la ha llevado la vegetación del suelo y no tanto los pinos, según han señalado las autoridades. Se espera que en unos tres años aparezcan los primeros brotes de los pinos canarios, mientras que la vegetación del suelo tardará entre 10 y 12 años en recuperarse.
Fotografías del #IFGranCanaria tomadas durante esta madrugada desde #Arucas. Se me rompe el alma al ver cómo se destruye nuevamente nuestro monte. Ojalá acabe pronto esta pesadilla. Ánimo y fuerza a las personas que están luchando contra las llamas.#FuerzaGranCanaria pic.twitter.com/2b6axU7TLP
— David Cabrera 📸🌍 (@dcabreraguillen) August 18, 2019
“Hablamos de decenas de miles de individuos endémicos de Canarias, entre los que figuran unas sesenta especies vegetales terrestres que son exclusivas de Gran Canaria, como la magarza plateada de Artenara o la col de risco de Tamadaba”, ha informado Juli Caujapé, el director del Jardín Botánico Canario Viera y Clavijo, centro asociado al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) que depende del Cabildo.
Sobre la fauna que habita la zona todavía no se sabe nada, lo que sí conocemos es que desde 1994 es Reserva de la Biosfera de la UNESCO debido a la gran variedad de animales que conviven en este parque, donde destacan aves como los pájaros carpinteros hasta el pinzón azul exclusivo de Gran Canaria. De hecho, hay una zona muy específica dentro de Tamadaba, en El Risco, que está especialmente protegida para las aves, tal y como se establece en la Directiva 79/409/CEE relativa a la Conservación de las Aves Silvestres.