Tres empresas de delivery — entre las que se incluye Glovo — dejarán de operar en Argentina, luego de que un juez dictara una suspensión de actividades hasta que no cumplan con el reglamento y sus repartidores porten indumentaria que los proteja ante accidentes.
El juez Andrés Gallardo, titular del Juzgado Contencioso Administrativo y Tributario N° 2, ordenó a Rappi, Glovo y PedidosYa suspender sus actividades. El magistrado también solicitó a las empresas de tarjetas de crédito como MasterCard, Visa, American Express y Tarjeta Naranja que bloqueen las operaciones de las compañías en sus plataformas.
Un reporte de La Nación indica que Gallardo pidió a Rappi, PedidosYa y Glovo una lista completa del personal, la constancia de haber entregado a sus repartidores cascos, indumentaria para visualización nocturna y la fijación de la caja en rodado, así como también contar con licencia sanitaria, constancia de regularidad laboral, seguros y ART.
La decisión del juez tiene como objetivo el regularizar las prestaciones de las empresas, impedir accidentes que cobren la vida de los riders, evitar daños a la salud por la manipulación indebida de los alimentos y prevenir que los sistemas de distribución sean utilizados para consumar ilícitos.
A pesar de que las tres compañías fueron avisadas desde hace siete meses, hasta ahora no han cumplido con los requisitos, por lo que el juez les dio un plazo máximo de dos días para entregar la documentación correspondiente.
La suspensión de las tres empresas se dará en la capital de Argentina y en caso de no respetar la decisión, las empresas se harán acreedoras a multas de $10.000 pesos (200 euros) por cada infracción, así como también el decomiso de los pedidos por la policía de la ciudad.