Al igual que las estrellas de rock o los ídolos del fútbol, los videojuegos también acceden al salón de la fama. Este año cuatro títulos han sido acreedores a la máxima distinción, tres de los cuales se mantienen vigentes con nuevos lanzamientos y adaptaciones para atraer a las audiencias más jóvenes.
Los nuevos miembros del Salón de la Fama de los Videojuegos en 2019 son Super Mario Kart, Mortal Kombat, Microsoft Solitaire y Colossal Cave Adventure. Los dos primeros marcaron tendencia durante la década de los noventa y definieron sus respectivos géneros, mientras que Solitario se convirtió, junto a Buscaminas, en una de las opciones para jugar en Windows antes de la llegada del internet.
Cada título tiene sus razones específicas para ser parte del selecto grupo de videojuegos que ya forman parte del Salón de la Fama. En el caso de Super Mario Kart, el juego de Nintendo popularizó el subgénero de go-karts en las consolas y ayudó a impulsar una franquicia que ha vendido más de 100 millones de copias a nivel mundial.
Mortal Kombat se posicionó como una alternativa al exitoso Street Fighter II, gracias a su jugabilidad y presencia de fatalities. El juego dio pie a una serie de adaptaciones en el cine, que si bien no llegaron al nivel de calidad que los fanáticos esperaban, marcaron a una generación gracias a la música techno creada por The Immortals. Actualmente el onceavo capítulo de la franquicia acaba de ser lanzado a la venta.
Los juegos nominados que quedaron fuera este año son Asteroids, Call of Duty, Candy Crush Saga, Centipede, Dance Dance Revolution, Half-Life, Metroid, Minecraft, Myst, NBA 2K, Sid Meier’s Civilization y Super Smash Bros. Melee.
Llama la atención que joyas como Half Life, Metroid y Sid Meier's Civilization sigan sin formar parte del Salón de la Fama, al igual que existan nominaciones como Candy Crush Saga o NBA 2K, dos franquicias que si bien gozan de popularidad, han sido criticadas fuertemente por su dependencia a las microtransacciones.