Tu smartphone tiene cámaras, micrófono y está conectado a internet prácticamente en todo momento, bien vía wifi o a través de datos móviles. Esto es bueno por la parte que te toca, pero también puede ser malo si tienes instalada una de las muchas aplicaciones espía que de vez en cuando se cuelan en las tiendas de aplicaciones.

Las aplicaciones espía se pueden colar haciéndose pasar por juegos gratuitos o por herramientas sencillas que no despiertan ninguna alarma. Es más, a pesar de que Google Play y App Store nos dicen qué permisos necesitan esas aplicaciones para funcionar, no siempre le prestamos atención.

En cualquier caso, tanto iOS como Android nos facilitan la tarea de mantener en corto nuestras aplicaciones instaladas evitando que tengan acceso a determinados elementos de nuestro teléfono o tableta, tanto de software como de hardware o de acceso a información personal.

Ajustando los permisos de Android

Decía que Google Play nos pregunta, antes de instalar una aplicación, si aceptamos darle a esa aplicación determinados permisos. Por ejemplo, si vas a instalar WhatsApp, te pedirá que le permitas ver el historial de aplicaciones en funcionamiento y acceder a la información relacionada con las cuentas de usuario del dispositivo, añadir o eliminar cuentas y leer tu agenda de contactos. Es más. Cuando tus aplicaciones se actualizan, si requieren de nuevos permisos, se te volverá a preguntar.

Pero una vez instalada la aplicación, podemos decidir qué permisos le damos y qué le prohibimos hacer. Si la app deja de funcionar correctamente, siempre estaremos a tiempo de volver a darle ciertos permisos.

Desde Ajustes > Aplicaciones y notificaciones > Permisos de aplicaciones encontraremos la lista de permisos que se le pueden dar o revocar a las aplicaciones de Android. Una vez dentro de cada apartado, es posible marcar y desmarcar cada una de las apps.

¿Te preocupa que te graben sin permiso? En ese caso, échale un vistazo a Cámara y Micrófono. ¿No quieres que accedan a tus datos personales? Fíjate en Contactos, Calendario y Almacenamiento o en Ubicación si no te interesa que sepan por donde te mueves.

Encontraremos más permisos en Acceso especial de aplicaciones dentro de Ajustes > Aplicaciones y notificaciones. En esa lista hay permisos delicados, como Modificar ajustes del sistema. En principio, en esa lista deberían haber solamente aplicaciones oficiales de Android, las imprescindibles para que todo funcione, y no de terceros.

Otro permiso a vigilar es el de Instalar aplicaciones desconocidas. Estando activada esta opción, es un colador para que se instalen aplicaciones, ya que no tendremos control directo de lo que se instala.

Ajustando los permisos de iOS

Si eres usuario de iPhone o iPad, también cuentas con estrategias y herramientas con las que gestionar los permisos que tienen las aplicaciones a según qué funciones o características de tu dispositivo.

El apartado más importante es Privacidad, que encontrarás en Ajustes. Ahí verás una lista de permisos, como Localización, Fotos, Micrófono, Cámara, etc. Si entras a cada uno verás las aplicaciones que han solicitado esos permisos y si se los diste o no. En todo momento puedes activar o desactivar el permiso en la aplicación que desees.

Otra opción interesante se encuentra al final de Privacidad. En Análisis puedes activar o desactivar la posibilidad que Apple emplee los datos generados por el uso de tus dispositivos en mejorar futuros productos. También puedes activar o desactivar esos datos en relación a iCloud. Y en el caso de la publicidad (Privacidad > Publicidad), podemos limitar la personalización de la publicidad que vemos en aplicaciones y juegos a partir de datos generados con nuestros hábitos.

Hay permisos concretos con los que podemos ser más precisos. En Localización podemos limitar esta funcionalidad para que no esté disponible, para que esté siempre disponible o solamente para que esté disponible mientras usamos la aplicación. Encontraremos estas opciones en Ajustes > Privacidad > Localización.