La cueva de Arredondo es el lugar escogido por los científicos para un nuevo proyecto: instalar una base marciana en una cueva en esta localidad cántabra. Pero no solo eso, a lo largo de este año, si todo sale según lo previsto por los organizadores, alrededor de 100 personas vivirán en esta base como si estuvieran haciéndolo en Marte.
Astroland, la recién creada Agencia Interplanetaria Española, es la encargada de llevar a cabo este proyecto en el que, de momento, tan solo diez grupos de diez personas podrán disfrutar. Estos 100 astrolanders entrarán en la cueva de Arredondo a partir del próximo mes de junio, según ha desvelado Francisco Martín, responsable de turismo de Cantabria. Además, los primeros en hacerlo serán investigadores, ya que la idea es recrear cómo debería ser la primera colonia que los humanos pongamos en Marte.
Con esta idea en la cabeza tendrán que dedicar su tiempo en esta cueva a sobrevivir en Marte, ya que allí, debido a las condiciones de bajas temperaturas, fuertes vientos y elevada radiación solar, lo más realista es instalar las bases bajo Tierra, más concretamente en túneles de lava.
Pero la aventura de estas personas no solo consistirá en conseguir germinar plantas en un suelo similar al marciano ni luchar con los incómodos trajes para salir de la base sino que también tendrán que enfrentarse 90 días antes a duras pruebas de entrenamiento para poder, después, vivir en esas condiciones. Los ejercicios no solo serán para probar las habilidades físicas y psíquicas del participante sino que también se valorará sus conocimientos científicos.
Aunque en un principio es un proyecto para unos poco privilegiados, el Martín ha dejado las puertas abiertas a que en un futuro el público general pueda acceder a él ya que en la actualidad el turismo que se demanda está más ligado con las experiencias.
Viajar a Marte cada vez parece estar más cerca, por eso desde Astroland señalan que este experimento ayudará a asentar los cimientos para poder ir al planeta rojo y estar preparados para vivir en condiciones que no son las mismas que hay en la Tierra. Calculan que para 2030 ya empezaremos este viaje, y aunque se pueda retrasar, esperaremos pacientes para ver al ser humano poner por primera vez un pie en nuestro vecino. ¿El primero en pisar Marte se habrá entrenado en esta cueva cántabra? Habrá que esperar para verlo.