Netflix está buscando la fórmula para abrirse paso también en mercados emergentes. La pasada semana, en una entrevista con Bloomberg era Reed Hastings, CEO de la compañía, quien afirmaba que estaban explorando planes más económicos para su expansión en Asia, donde la competencia tiene precios muchos más agresivos que en occidente que parten de poco más de dos dólares al mes. Hoy se concreta por dónde pueden ir sus ideas al respecto.

Y es que al menos en Malasia ya está disponible un nuevo plan más económico sin llegar a ser una simple reducción de precios. Netflix ha activado una nueva opción únicamente para dispositivos móviles a aproximadamente mitad de precio del plan estándar.

Este nuevo plan tiene mucho sentido en países como India donde el ordenador principal, e incluso el único, de muchos usuarios es directamente el dispositivo móvil. Así, los planes en dicho país quedarían en torno a unos 3,60 euros al cambio para el nuevo plan Móvil, 7 euros para el plan Básico (un dispositivo), 8,80 euros para el plan Estándar de dos pantallas y unos 10,70 euros para el plan Premium.

Para consolidarse, primero hay que estar

No se espera que en Europa u otros países de América vean reducidas sus tarifas, sino más bien progresivamente todo lo contrario –lo último que hemos visto además son subidas de precio–. Pero sí que es posible que este nuevo plan más limitado sí sea compatible con otras regiones como las nuestras, recortando hasta nuevos mínimos los servicios de Netflix al completo.

La empresa de vídeo bajo demanda por excelencia está haciendo inversiones enormes para aterrizar y consolidarse en múltiples mercados a nivel mundial. En todos ellos ha de hacerse un hueco entre los jugadores locales, que parten de una posición más cómoda. Tan solo la semana pasada, la compañía anunciaba 17 nuevas series en 5 países asiáticos.

De momento no se trata de una estrategia bien definida que parta de precios más agresivos en ciertos países, sino que más bien Netflix quiere experimentar con éstos en algunos y ver qué tal les va. Mientras tanto, este cuarto plan más económico le sirve de caballo de Troya que permita a usuarios de otras plataformas probar sus producciones.

Con más de 130 millones de suscriptores de pago a nivel mundial le toca competir con alternativas como YouTube, el servicio de vídeo más popular de Asia que es, además, gratuito. En India en concreto, con un detalle que recogía la entrevista a Hastings de hace unos días: lo harán por el nicho de 100 millones de usuarios que hablan inglés y pueden permitírselo.

La competencia es dura, como reconocía Reed Hastings en la presentación de los últimos resultados trimestrales:

"Hay demasiados competidores. Por supuesto, Disney va a entrar, AT&T va a expandir HBO, YouTube está on fire creciendo en todo el mundo, video gaming como Fortnite, hay demasiadas formas de tener un buen entretenimiento en la pantalla."