La versión 69 de Chrome llegó con un rediseño visual que ha sido muy bien recibido por sus usuarios, sin embargo, el navegador también incorpora una característica que ha empezado a generar polémica por temas relacionados con la privacidad. Quizá ya lo experimentaste por cuenta propia y no entendías muy bien lo que estaba ocurriendo.

La situación es tan simple como preocupante. Si el usuario no ha iniciado sesión en el navegador para evitar compartir su información de búsqueda y otro tipo de datos privados, Chrome forzará ese inicio de sesión en el momento en que se acceda a alguno de los servicios de la compañía. Por ejemplo, si accedes a tu cuenta de Gmail, automáticamente se iniciará la sesión (con la misma cuenta) en el navegador. Google no había avisado sobre esta característica y tampoco solicita permiso al usuario para realizarlo.

Google ya está enterada de las críticas y ha dado una explicación que no termina por convencer a muchos. Adrienne Porter Felt, responsable de Google Chrome, explicó en Twitter que el inicio de sesión forzado no genera que se sincronicen los datos hacia sus servidores sin previa autorización del usuario.

¿Entonces por qué forzar el acceso? Felt señala que han encontrado una problemática en los dispositivos compartidos por dos o más personas. A veces un usuario cierra sesión en sus servicios, como Gmail y YouTube, y piensa que también ha salido de la sesión de Chrome. Esto genera que el próximo usuario que use el dispositivo pueda acceder a los datos del navegador de la persona que lo usó anteriormente.

Algunos expertos en seguridad ya se están pronunciando sobre la situación, y por supuesto, sus opiniones van en contra de esta práctica. Matthew Green, un profesor de criptografía en la Universidad Johns Hopkins, menciona en su blog que es anormal que Google no siga sus propias políticas de privacidad como siempre lo ha hecho. Por el contrario tenemos a Facebook, la red social que constantemente cambia sus políticas para favorecerse y termina ofreciendo una disculpa tiempo después. Green deja claro que este tipo de movimientos terminan por generar desconfianza en las personas.

El profesor no duda en señalar que el inicio de sesión forzado es un "patrón oscuro" utilizado por muchos sitios, que consiste en utilizar la interfaz gráfica de una aplicación para que los usuarios terminen por utilizar una determinada característica. En este caso, la sincronización de datos de Chrome.

No sabemos si ante las críticas Google dará marcha atrás, pero los usuarios más fieles del navegador están mostrando su descontento en redes sociales y esto podría generar un revés en la decisión. También es cierto que Google tiene la libertad de implementar las funciones que quiera en sus aplicaciones, pero siempre respetando las políticas de privacidad que ellos mismos han creado.