Pocas cosas tan divertidas al mismo tiempo que patéticas en el espacio de la tecnología que el fundador de una empresa destrozando en público a su competencia. Es exactamente lo que ha sucedido con Palmer Luckey.

Luckey, con 25 años, fundador de Oculus VR y diseñador del Oculus Rift, ha publicado en su blog una larga reseña del Magic Leap One, el primer producto —orientado a desarrolladores— de Magic Leap, lanzado después de años de generar hype y obtener cantidades inmensas de dinero.

El Magic Leap One ya está a la venta por 2.295 dólares, pero no lo vas a poder comprar

En su análisis profundo del Magic Leap One explica, punto por punto, por qué el producto es una decepción, desmitifica algunos de los puntos clave que Magic Leap ha usado para diferenciarse de su competencia y comenta el método con el que llegó a la conclusión que apenas se han vendido unos 3.000 dispositivos.

Buzzwords, poca innovación y lento

De acuerdo a Luckey, quien tiene uno de los dispositivos en su poder, el Magic Leap One es lento al posicionar objetos virtuales en el plano real y la manipulación de estos por parte del usuario. Profundiza en términos técnicos, pero explica por qué fue una mala idea el método usado por Magic Leap además de compararlo con soluciones innovadoras de otras empresas en el plano de la realidad virtual y aumentada, incluyendo a HTC, Sony Oculus, Lenovo y ALPS, "sin la necesidad de miles de millones de dólares en financiación".

También critica la falta de click en el trackpad en los controles del Magic Leap One, una característica usada por la mayoría de los diseñadores de aplicaciones de realidad virtual y aumentada.

Así mismo explica que el Lightpack, donde están todos los componentes que hacen que el Magic Leap One funcione y que se coloca en la cintura, son básicamente los internos de una tablet.

También alaba el hecho que estos componentes es estén fuera del visor, reduciendo así su peso, y teniendo la posibilidad de poner componentes más potentes, a diferencia de la competencia.

Pero también critica que LuminOS, el "sistema operativo propio" que Magic Leap presume, en realidad es un Android modificado con una interfaz gráfica poco útil "que recuerda al menú de un Android Wear flotando frente a ti (…) Se parece a lo que Microsoft mostraba hace tres años. Son algunas de las peores partes de la interfaz gráfica de un smartphone pegadas a algunas de los elementos más vistosos de una interfaz gráfica de realidad virtual".

Pocos minutos después de la publicación de la "reseña", el fundador y CEO de Magic Leap, Rony Abovitz, tomó Twitter para lanzar una serie de subtweets contra Luckey:

Cifras de ventas

Palmer Luckey cree que se han vendido menos de tres mil Magic Leap One desde su lanzamiento, con la mayoría de los dispositivos adquiridos durante las primeras 48 horas del lanzamiento. Llegó a la conclusión basado en los números asignados a las órdenes de compra de amigos y conocidos correlacionados con la fecha en que se hizo el pago. En Twitter aseguró que conoce al 20% de personas que han comprado uno.

Independientemente de si es real o una total exageración, poco después del tuit, Magic Leap cambió el sistema de numeración de las órdenes de compra del dispositivo.

Palmer Luckey: apoyo a Donald Trump y despido de Facebook

Palmer Luckey con el Oculus Rift

Palmer Luckey pasó de ser un héroe de la tecnología seguramente por su corta edad al fundar la compañía más conocida de la realidad virtual a un villano por apoyar a Donald Trump y donar 10.000 dólares a Nimble America un grupo a favor del Presidente de Estados Unidos, que participó en su campaña política.

Luckey también ha donado a las campañas de re-elección de varios políticos del partido republicano incluyendo a Ted Cruz, Mike Pence, Mimi Walters y Kevin McCarthy.

Durante su testimonio ante el senado estadounidense, Mark Zuckerberg confirmó que Palmer Luckey fue despedido de Oculus (Facebook compró la compañía en 2014), pero aseguró que no se debió a motivos políticos.