El rescate exitoso de los doce niños atrapados en una cueva en Tailandia ha cautivado y ha dominado el ciclo de noticias de actualidad en todo el mundo. Tal vez por eso el anuncio de Elon Musk que enviaría a un equipo de ingenieros para ayudar ha causado tanta controversia.

Por un lado la comunidad tecnológica parece haberse llenado de orgullo con el anuncio y la velocidad en que el equipo enviado por Musk fue capaz de desarrollar una cápsula donde puede entrar una persona y ser conducido por dos buzos en espacios supuestamente pequeños.

"Es un minisubmarino usando el tubo de transferencia de oxígeno líquido del cohete Falcon". Los nerds aplaudieron con rabia. La tecnología lo resuelve todo, el genio de moda en la actualidad lo ha vuelto a hacer. Es nuestro nuevo Steve Jobs, es el que nos mostrará el futuro.

Bueno, no. Al menos en este caso.

Es el otro lado de la controversia. Musk ha sido acusado de aprovecharse de una desgracia que puso en jaque la vida de doce niños, de hacer la visita al país para ganarse nuevamente a la prensa. También de haber enviado un tubo de metal que no sirvió para el rescate y lo que es peor, haberlo dejado ahí.

Las acusaciones tienen sustento. El jefe de los rescatistas en Tailandia, Narongsak Osatanakorn, comentó en una entrevista a la BBC: "El equipo enviado para ayudarnos no es práctico para esta misión. Aunque es tecnológicamente sofisticado, simplemente no sirve para entrar en la cueva".

Paciencia, determinación, entrenamiento y disciplina

Los rescates dentro de cuevas son extremadamente complicados, las condiciones son terribles, tan ajenas a nuestro día a día que es complicado imaginarnos en una situación tan adversa y donde morir resulta tan simple.

Kera Roslen, parte de la división de planificación estretégica de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos, quien además está certificada para realizar buceo dentro de cuevas y rescates de este tipo, publicó un largo hilo en Twitter donde explica las extremas dificultades a las cuales los rescatistas y los niños atrapados se han enfrentado.

https://twitter.com/Where_is_Puff/status/1016112164418015232

En este caso la tecnología ayuda poco. Se requiere de muchísimo valor, una inmensa paciencia, determinación y sobre todo mucha disciplina para entrar e intentar el rescate. Lo mismo es necesario por parte de quienes estaban atrapados. Se trata de lograr que personas que jamás han buceado en estas condiciones, sean capaces de hacerlos para salir con vida.

Es por eso que expertos con voz cualificada para opinar sobre este tipo de rescates tomaron con mucho esceptisismo las palabras de Musk, el aparente oportunismo, el timing de sus tuits durante los momentos más duros del rescate y nuevamente pretender que la tecnología lo resuelve todo.