Los nuevos buque insignia de Samsung llegan de manera oficial este próximo domingo día 25 de febrero. La compañía surcoreana tiene programado para entonces su evento de presentación dentro del marco del Mobile World Congress de Barcelona, que da comienzo el lunes día 26. Ante medios de todo el mundo, la gigante tecnológica dará a conocer qué es en lo que ha estado trabajando durante todo este año en materia de terminales móviles.
Como viene siendo costumbre, no obstante, buena parte de los datos acerca de estos nuevos dispositivos se han ido desvelando ya durante estas semanas previas, pudiendo conocer de manera bastante exacta que será lo que veamos en el escenario de Samsung durante este MWC 2018. Uno de los aspectos que faltaba por conocer aún era el precio, el cual desvela hoy Evan Blass, conocido por sus certeras filtraciones, a través de su cuenta de Twitter.
Mejores, más caros
Los nuevos Samsung Galaxy S9 y Galaxy S9+ serán más caros que sus predecesores, si hacemos caso a la filtración de Blass, que únicamente confirma lo que ya se venía rumoreando anteriormente. La gama alta está adquiriendo cada vez precios más elevados y, aunque Samsung no parece atreverse a romper la barrera de los mil euros con estos modelos (ya lo hizo con el Galaxy Note 8), la diferencia es notable respecto al año pasado. Así, el modelo de menores dimensiones pasará a costar 841 euros –frente a los 809 del S8– y el de mayor tamaño ascenderá a los 997 euros –frente a los 909 € del S8+–.
Estas son todas las características del Samsung Galaxy S9
Unos precios que irán acompañados de una novedosas características que, aunque no estarán presentes en el aspecto estético, sí serán apreciables en el interior del terminal. Aunque ya sabemos mucho, será este domingo cuando podamos comprobar por fin cuáles son todos los argumentos que tiene Samsung para aumentar el precio a su dispositivo y continuar contando con el favor de los usuarios. Este ha sido uno de los aspectos más polémicos de los terminales premium de la casa durante los últimos años, puesto que su valor en el mercado se ve rápidamente diluido a los pocos meses de su salida al mercado. Todo apunta a que dicha polémica persistirá este año.